Con motivo de la festividad de San Cayetano, que se celebra mañana jueves 7 de agosto, hubo un comunicado conjunto de la Conferencia Episcopal Argentina.
San Cayetano, patrono del pan, la paz y el trabajo motivó que los obispos señalan el deseo de unirse a los miles de fieles que entodo el país se acercan a santuarios, parroquias y comunidades para pedir su intersección o agradecer.
"La devoción a San Cayetano es una expresión profunda de la fe de nuestro pueblo, que no se resigna ante el sufrimiento y que, con esperanza y solidarida, reza y camina, poniendo en manos de Dios sus necesidades personales y familiares mas urgentes.
Este día nos invita a escuchar el clamor de tantos hermanos y hermanas que ven en el trabajo la posibilidad de ser útiles y de contribuir el bien común. Trabajar constituye un derecho fundamental que construye la vida propia y la del grupo familiar, y sostiene el tejido social.La falta de trabajo hiere profunamente la dignidad de las personas y puede conducir al desaliento, el aislamiento y a la pérdia de sentido.
En too plan económico, cuidar el empleo y las fuentes laborales debe ser una prioridad indeclinable.Ninguna media puede considerarse exitosa si implica quqe los trabajdores pierdan su empleo o vivan con angustia e incertidumbre sobre su futuro.
En tiempos difíciles, valoremso todas las formas de trabjo: el empleo formal, los emprendimientos familiares, la economía popualr, el reciclado, las changas. Toda actividad que, con esfuerzo, lleva dignamente el pan a la mesa merece ser reconocida, acompañada y protegida.
Pedimos la intercesión de San Cayetano para que no falte el trabajo digno en nuestros hogares y para que quienes hoy están desocupados o viven en condiciones laborales precarias encuentren nuevas oportunidades que les devuelvan la espeanza y mejoren su calidad de vida.
Firma el comunicado el presidente de la comisión ejecutiva de la Conferencia Episcopal Argentina, monseñor Marcelo Colombo; el vicepresidente 1) cardenal Angel Rossi; monseñor César Fernández, vicepresidente 1); monseor Raúl Pizarro, secretario general.
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