Hoy, 25 de junio, se cumplen 50 años de la hazaña del ciclista quilmeño Octavio Dazzán, en Lausana, Suiza, cuando lograb el título mundial juvenil en velocidad pura.
Octavio, preparado por su padre, Luis Dazzán, alcanzaba un logro increíble, sobre todo porque debió superar una serie de obstáculos para alcanzar el título, entre ellos un accidente que puso en peligro su continuidad en la prueba.
Incluso estuvo a punto de no poder seguir, y su padre, tuvo que hacerse cargo de la responsabilidad de lo que venía, porque las heridas de una caida lo pusieron cerca del abandono.
Pero Octavio y su padre Luis no bajaron los brazos y terminaron dándole a la Argentina y a Quilmes un título que medio siglo después sigue valorándose.
El periodista Bruno Passarelli, en la revista El Gráfico, publicó una extensa y maravillosa nota de la odisea de Dazzán, en un ambiente hostil y superando todos los escollos habidos y por haber.
Recordemos que Octavio falleció en Italia en enero del año pasado.
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