En LOS ANDES se apunaron los clubes del poder
Los Andes, el club de Lomas de Zamora, logró el ascenso a la primera Nacional, de la mano del técnico quilmeño, Leonardo Lemos.
El conductor confesó que el logró fue muy difícil, todo se hizo durísimo y fue la lucha contra todos, pero finalmente alcanzaron el objetivo.
Todo comenzó con el título Apertura, que ganó el Mil Rayitas con el técnico Fernando Ruiz.
Lamentablemente, no se repitió la campaña en el Clausura, el equipo bajó ostensiblemente su nivel y los resultados que se dieron fueron adversos, a tal punto de colocar al equipo en el fondo de la tabla.
Eso determinó la salida de Fernando Ruiz y la llegada del quilmeño Leonardo Lemos en setiembre.
Con aquel dicho de que escoba nueva siempre barre bien, las cosas comenzaron a cambiar. Leonardo sabía que Los Andes, al haber ganado el Apertura, iba a jugar la final por el ascenso con el ganador del Clausura, que fue Colegiales.
El de Munro, que había perdido el Apertura por muy poco, se desquitó en esa final y se quedó con el pase a la primera Nacional.
Los Andes tuvo que recuperar el ánimo y el fútbol en el Reducido. En primer lugar le tocó enfrentar al Deportivo Armenio. Fue derrota en Lomas de Zamora y el futuro se complicó. Sin embargo, hubo reacción y con un sprint espectacular dio vueltas las cosas y ganó en el difícil reducto de Ingeniero Maschwitz.
Dejó atrás a uno de los llamados clubes del poder, por la presencia los Nakis en Armenio.
En la siguiente vuelta el rival fue Argentino de Quilmes, también apodado club del poder. Ese dato se vio primero en la designación del árbitro en Lomas de Zamora, Américo Monsalvo. A la hora de revisar las estadísticas se advirtió que en cuatro años dirigidó a los Mates doce veces, con una sola derrota del club de la barranca. Ese fue el alerta, sin embargo Los Andes ganó en Lomas 1 a 0.
La revancha se disputó en Quilmes, y el árbitro "elegido" fue Ignacio Lupani. No dirigía desde hacía seis meses y en el archivo estaba el partido que el Mate jugó en Ezeiza con el Sportivo Italiano, con los fallos muy discutibles del juez: un penal para el quilmeño que evidentemente no fue y un gol de Italiano, anulado por presunta falta al arquero, cosa que de ninguna manera fue.
Cuando el partido estaba por comenzar, en el vestuario el árbitro arrugó, denunció que recibió amenazas y que no estaba en condiciones de dirigir. A las corridas se logró reemplazarlo por un árbitro de la primera división, Leandro Rey Hilfer. El partido se jugó con el temor de que no alcanzara el tiempo porque se podía venir la noche, y Argentino no tiene iluminación. Ganó el Mate 1 a 0 y hubo que definir por penales. Ahí ganó Los Andes.
Después llegó el momento de la gran final con Sarmiento de La Banda, Santiago del Estero, que se disputó en Belgrano de Córdoba. Para ese partido se nombró a un juez de primera, de reconocida honestidad, Ariel Penel, quien tuvo una labor impecable.
Se jugó al fútbol, el partido fue bárbaro y Los Andes ganó 1 a 0, pero tuvo muchísimas ocasiones para estirar las cifras, aunque el santiagueño también tuvo lo suyo.
Lo cierto es que la victoria catapultó a Los Andes a la primera Nacional.
Recordemos que Sarmiento de La Banda, club muy ligado con el poder, a través del tesorero de AFA, Pablo Toviggino, curiosamente cuñado del técnico Pablo Martel, tuvo partidos muy polémicos con los rivales de Bahía Blanca, Olimpo y Villa Mitre, donde se utilizaron todos los recursos, algunos nada lícitos, para buscar el ascenso. Lo impidió Los Andes, con Leonardo Lemos al frente.
Los Andes llegó a la principal categoría del fútbol de ascenso después de superar a tres clubes de los llamados del poder, y eso da todavía mas mérito al logro.
"Luchamos contra todos y logramos el objetivo" resumió Leonardo Lemos, quien agradeció la felicitación que recibió desde esta página de Cultivos de Quilmes.
En síntesis, en la cima de Los Andes, los clubes del poder se "apunaron".
El año próximo Los Andes suma otro club del Conurbano Sur a la primera Nacional. Ya están Talleres de Escalada, Tristán Suárez, Quilmes, Arsenal, Temperley, Almirante Brown, San Telmo... El Sur también existe.
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