El episodio que involucra al gendarme Nahuel Gallo en Venezuela, acusado por el régimen de acciones terroristas, cuando simplemente viajó al país bolivariano para visitar a su pareja y a su hijo, sigue escalando y pone en el tapete la ríspida relación entre los gobiernos de ambas naciones.
Después de la conferencia de prensa de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich y del canciller, Gerardo Werthein, el régimen de Nicolás Maduro reaccionó violentamente y dibujo una patraña, propia de un guionista de policiales. Ahora acusan a la dupla Bullrich-Werthein estar detrás de las acciones guerrilleras del gendarme e incluso los ponen en el marco de la causa.
Resulta increíble y solamente comprensible en un régimen en el que los derechos humanos no existen -no olvidar que hay un montón de presos en las cárceles venezolanas, con duros tratos, falta de respeto a los derechos, torturas y todo lo que se puede imaginar- entender hacia donde apunta Nicolás Maduro en esta batalla feroz que libra contra el gobierno de Javier Milei.
A medida que se acerca el 10 de enero, fecha en la que Nicolás Maduro debería dejar el poder tras perder las elecciones en su momento, crece la escalada de los bolivarianos para producir una "guerra" infernal.
Por eso no deben extrañar las declaraciones del presidente venezolano y sus secuaces, incluido este inefable fiscal Tarek William Saab, con apellido libanés, que se ha convertido en un auténtico fabulador de acusaciones contra un gendarme, que solo tuvo el tupé de pretender departir con su familia. Dio todos los pasos propios del ingreso al país bolivariano y sin embargo, lo están usando para tratar de convencer a la opinión pública -solo los del régimen creen semejante patraña- de que han capturado a un terrorista de fuste. En ese camino aparece el "convertido al chavismo" Oscar Laborde, que despreciando su lugar de origen -Avellaneda- parece estar enamorado del régimen venezolano/cubano que gobierna una Nación, que no se cansa de expulsar habitantes de la patria de Simón Bolívar.
Hay quien sostiene que Oscar Laborde hizo "la gestión" desde su domicilio en Wilde...¿Será cierto?
Nahuel Gallo, un gendarme que realizaba su tarea en el puestos Los Patos, de pronto se transformó en un terrible terrorista, capaz de desestabilizar y poner en riesgo la continuidad de Nicolás Maduro y sus secuaces, en un sistema que no permite la crítica y que la pena con la cárcel como destino.
¿Esta historia tendrá en algún momento el sentido común para tener una definición que no sea el menos común de los sentidos?
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