La Cámara de Diputados, después de la intensa y extensa sesión de ayer, en que se aprobó el proyecto de ley de prevención de la ludopatía y regulación de los juegos de azar, hoy no pudo sesionar por falta de quórum. El tema a tratar era el de la Ficha Limpia, que impide ocupar cargos si se tienen condenas judiciales en cualquier instancia.
Al igual que la semana pasada no hubo el número necesario, es decir 129 diputados, pero a diferencia de la otra vez en esta oportunidad solo se sentaron 116 legisladores. Hace una semana fueron 128, o sea que faltó un solo legislador.
Así las cosas hubo sesión en minoría con expresiones de distintos diputados, lamentando las ausencias, criticando la doble vara de algunos diputados, e incluso apuntando a los que estuvieron hace una semana y hoy no se sentaron.
El diputado por Mendoza, Julio Cobos, hizo un balance de la acción legislativa del año y lamentó la que a su entender es una escasa cantidad de leyes aprobadas, porque si bien contó 43, dijo que la mayoría fueron tratados internacionales y harinas de ese costal. Pero las leyes propiamente dichas, destinadas a la ciudadania, sólo fueron 12, y agregó que dos de ellas fueron vetadas por el presidente de la Nación: financiamiento universitario y movilidad jubilatoria.
Cobos dijo que ese número de diez leyes significaba muy poco y alentó para que el presidente decida la prórroga de las sesiones o bien, el llamado a extraordinarias, y que incluya en ese temario al motivo de esta sesión: Ficha Limpia.
Añadió Cobos que en su provincia, Mendoza, la Ficha Limpia estaba vigente e implicaba la imposibilidad de ocupar cargosquienes tuvieran antecendentes penales, condenas o procesamientos.
La diputada por Entre Ríos, Nancy Ballejos, también lamentó el fracaso de la sesión y recordó que en su provincia estuvo el caso del ex gobernador Urribarri, con toda su secuela de corrupción y la respectiva condena.
El cierre de esta sesión en minoría estuvo a cargo del santafesino Nicolás Mayoraz, de La Libertad Avanza, quien aseguró que tarde o temprano se iba a tratar Ficha Limpia y recordó que en la apertura de las sesiones ordinarias el pasado 1 de marzo, el presidente Javier Milei se había comprometido para aprobar Ficha Limpia y en ese sentido se va a insistir para que finalmente sea sancionada.
Cruces de acusaciones, versiones con o sin fundamentos, especies de toma y daca -no olvidar que se ha dicho que este instrumento tenía nombre y apellido, es decir, Cristina Kirchner con su cuota de corrupción condenada en dos instancias-, dimes y diretes, tejes y manejes -incluso se relaciona esto con los candidatos a la Suprema Corte enviados por el Poder Ejecutivo, los jueces Lijo y García Mansilla y una negociación, créase o no, con CFK-, etcétera.
Ficha Limpia es un instrumento que hace a la idoneidad de los que ocupan cargos, porque no resulta imposible digerir que haya quienes estén en ese lugar y tengan causas judiciales o condenas como mochila.
Recién se escuchaba al diputado Gerardo Huesen, de La Libertad Avanza, arguir que no dio quórum hace una semana por razones de salud. Arguyó que estaba descompuesto y mostró un certificado médico, porque no hay que olvidar que llegó un minuto después de la media hora de tolerancia que permitió el presidente de la Cámara, tras el cual levantó la sesión por falta de quórum.
Huesen se quejó de un ex libertario, como el diputado Oscar Zago, asegurando que mientras el hacía su descargo por razones de salud, su par se reía de su infortunio y de sus argumentos.
Evidentemente, el tema Ficha Limpia sacude a muchos y como también dijo una señora diputada, al que le quepa el sayo, que se lo ponga. La realidad es que hay muchos que gambetean la sanción del proyecto porque esconden algo bajo la alfombra. O sea, están sucios como para permitir que salga la popular Ficha Limpia.
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