Por Eduardo Menescaldi
Si el régimen de Nicolás Maduro mantiene su endurecimiento, con represión feroz -léase muertos, torturados, desaparecidos, detenidos, etcétera- será muy difícil sostener en esta parte de América la relación entre los países, sobre todo porque la persistencia del dictador de defender comicios amañados y que se traducirán muy pronto en la presentación de actas terriblemente truchas -dicen que las están dibujando en Caracas con la participación de 150 personas- agravará la situación.
Días pasados el analista Carlos Pagni imaginaba que esta actualidad va a estallar en mayor represión interna y mayor exilio externo. Ya hay mas de 8 millones de venezolanos desparramados por el mundo y la violencia de Maduro puede generar que otro millón pueda rápidamente buscar países donde puedan vivir libremente.
En medio de este análisis, se sabe que Brasil, que fue ambiguo en la OEA con su abstención, decidió estrechar lazos con Argentina y ofreció hacerse cargo de la embajada albiceleste en Venezuela, para asegurar la salida normal de los diplomáticos argentinos hacia nuestro país y a su vez, encargarse de resguardar la seguridad de los seis asilados venezolanos que están en dicha embajada.
El presidente argentino, Javier Milei, al igual que la canciller Diana Mondino, agradecieron el gesto brasileño y Milei fue mas allá, diciendo que las relaciones entre ambos países están cada vez mas fuertes, aventando toda la serie de epítetos que en su momento lanzó Milei contra su par Luis Lula da Silva.
Precisamente el presidente brasileño, también el primera mandatario colombiano, Gustavo Petro, que fueron ambiguos en la OEA con la abstención, saben que lo que está pasando en Venezuela puede provocar una rápida salida de muchísimos venezolanos hacia sus países, que tienen frontera con el país caribeño.
Frente a lo que viene, la pregunta que vale la pena hacer es cómo hará Sudamérica para soportar a la Venezuela "cubana". La realidad es que Cuba tiene mucha incidencia en el régimen venezolano y es el principal aliado del dictador, a tal punto que dicen que están colaborando en la confección de las actas dibujadas.
Si Maduro mantiene el poder contra viento y marea, vociferando fuego contra los opositores y los países que no admiten los resultados que se pretenden instalar, entonces la región estará en peligro, al menos porque Venezuela cuenta con la colaboración de los regímenes autoritarios que rápidamente reconocieron la reelección de Maduro. En América, Bolivia, Honduras, Nicaragua, por supuesto Cuba, y fuera del continente, Rusia, Irán, China, Qatar, Bielorrusia...
Así las cosas el grano cubano en el cuerpo de América, puntualmente del sur del continente, va a constituir un faro de riesgo para las posibilidades políticas de las naciones de la región.
En nuestro país sigue aturdiendo el silencio del kirchnerismo, aunque la jefa, CFK, tiene mañana en México la posibilidad de expresarse -no olvidar el pasado con los actos de admiración y elogio al tirano de Venezuela- y habrá que ver cómo sale del atolladero de justificar un acto eleccionario totalmente amañado y los episodios posteriores de represión, tortura, desaparición y muerte...
¿Acaso hay derechos humanos de izquierda o de derecha como pretenden justificar...?
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