Ya está en marcha el proceso de postulación por el Poder Ejecutivo de los jueces Ariel Lijo y Manuel García Mansilla a la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
En estos días se reciben apoyo y reprobaciones a estos magistrados para que luego sea el Senado de la Nación el que se encargue de confirmarlos o no.
Recordemos que Ariel Lijo es propuesto para ocupar el lugar que dejó la doctora Elena Highton, de Nolasco mientras que García Mansilla recién podrá ocupar el cargo, si se aprueba su pliego por el Senado, a fin de año cuando deje el máximo tribunal Juan Carlos Maqueda, quien llegará al límite de los 75 años.
Manuel García Mansilla es decano de la facultad de Derecho de la Universidad Austral y la propuesta que lo llevaría a la Corte no aparece con demasiadas objeciones.
En cuanto a Ariel Lijo, evidentemente las cosas son totalmente distintas. Según comentó el periodista Carlos Pagni anoche en su programa Odisea Argentina por La Nación+ dio cuenta de los peros que registra este candidato, sobre todo por estar "flojo de papeles" en algunas sentencias, como aquella que favoreció a Amado Boudou y su relación con All Fund, llevando la decisión judicial a un magistrado de Formosa, la tierra del incondicional Gildo Insfrán, con jueces realmente cooptados por el poder político.
Pero no quedan ahí los peros contra Lijo. Se habla de su hermano Federico, quien se automenciona como operador judicial sin ponerse colorado, y está ligado a una serie de movimientos económicos algunos con poca claridad.
De todas maneras, lo que podría llamar Javier Milei "la casta judicial" se muestra favorable a la nominación, Así por lo menos lo hicieron saber varias integrantes del Poder Judicial, desde María Servini a la jueza Capuchetti.
En la política hay mas posiciones a favor que en contra. En cuanto al rechazo sobresale Lilita Carrió y sus seguidores. Fue Carrió la que en su momento presentó un denuncia contra Lijo, que terminó durmiendo el sueño de los justos.
En el Senado, Lijo tendrá que conseguir el maravilloso número de 48 votos favorables, lo que significa que de aquí a la fecha del tratamiento se seguirán realizando negociaciones y movimientos políticos para lograr el apoyo.
Javier Milei no ha dicho nada en contra de Lijo. Tampoco se pronunció la política que tiene importante poder en la Cámara Alta, Cristina Kirchner, e incluso se ha dicho que le conviene acompañarlo porque con Lijo podría encontrar la avenida de la impunidad que tanta la favorece para licuar sus causas judiciales.
Como se ve, el caso de la postulación del Ejecutivo al juez, aparece algo Despro...lijo, pero se entiende que pese a que Pagni tituló ayer su editorial como Jurisprudencia de la corrupción, la sensación que se tiene es que el aparato judicial terminará dando el aval al juez para que finalmente el Senado lo consagre.
Argentina, tierra de amor y venganza (atav) como encabezaba como título la telenovela. El caso Lijo seguramente va a provocar una nueva grieta en un país donde esa palabra que puso en cartel el periodista Jorge Lanata en una entrega de Martín Fierro cada vez tiene mas surcos, avenidas por donde transita la realidad nacional.
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