"Pedro y el lobo", un cuento sinfónico y escénico creado en forma comunitaria se puso en escena en el teatro Roma de Avellaneda.
En el marco de los treinta años de Surdanza cerró la programación del Roma 2023 a sala llena, con un proyecto comunitario digno de destacar.
"Pedro y el lobo", de Prokofiev, un cuento sinfónico para las infancias y a través de la danza y el teatro junto a la orquesta Nos Meraki, dirigida por Ezequiel Saracco y formada por jóvenes músicos del Conurbano y de CABA.
"No es habitual disfrutar de obras escénicas con una orquesta en vivo sonando en nuestro querido teatro Roma, que es un teatro lírico, con todas las necesidades y potenciales para llevar adelante proyectos líricos y ballet o musicales con orquesta a foso abierto y poblado de músicos y sonoridad" afirmó Luciana Prato, directora escénica y general del proyecto con mas de 70 jóvenes, niños y niñas estudiantes de los talleres y clases de Surdanza, una escuela que cumplió 30 años de trayectoria, articulados con profesionales como Martín Casalonga, en el rol de relator y abuelo y María Eugenia Seijoo, bailarina de danzas españolas y flamenco como el pájaro, junto a docentes de danza y teatro musical se llevó adelante este proyecto y ballet con orquesta y comunitaria gracias al apoyo del Instituto Cultural de la Provincia en el marco de las culturas comunitarias.
Originariamente la obra fue creada a mediados del siglo XX para acercar a las infancias y juventudes al conocimiento de los instrumentos y sonido de la orquesta y la posiblidad de contar historias y mensajes a través de la música sinfónica. Cada personaje está representado por un instrumento de la orquesta.
Surdanza ya realizó una pequeña versión de menor envergadura en 2013 en el teatro del Globo pero este proyecto integró la orquesta en vivo y una versión no solo completa sino con pasajes extendidos y agregados junto con unn relato adaptado y enriquecido por Luciana Prato e interpretado con la ductibilidad fresca por Martín Casalongue, que actuó y desplegó todo su potencial en el escenario acompañando por el nutrido grupo de niños, niñas y jóvenes entre 4 y 25 años que poblaron el escenario.
"Nos mueve la certeza de que la creación colectiva experimentada en la niñez y adolescencia no solo amplía el mundo simbólico sino que deja huellas imborrables en cada uno y en el escenario teatral.
Se encuentran abiertas las inscripciones del ciclo 2024 en las áreas de danza, teatro musical, música teatro conpropuestas desde los 9 meses hasta la tercera edad.
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