Los números no mienten. Vale reproducir un artículo de la periodista Paula Urien en La Nación sobre el crecimiento del empleo público, que entre 2003 y 2023 -de ellos 16 años de kirchnerismo- en el orden del 70 por ciento, según los datos de Ieral.
Se menciona que desde hace mas de quince años diversos economistas alertan sobre el aumento del empleo público y la falta de creación de trabajo privado formal, estancado desde 2012. A pesar de estos puestos generados por el Estado, que exceden el aumento de la población, la pobreza no bajó sino todo lo contrario.
Datos referidos a noviembre del año pasado muestran que había 6.381.000 asalariados privados registrados con un crecimiento interanual del 1,6% y 3.503.000 asalariados públicos, con un aumento en la misma comparación de 2,9%. A contramarcha de las marchas y contramarchas de la economía, el empleo público siguió en alza.
Se agregan palabras de Marcelo Capello, vicepresidente del Instituto de Estudios sobre la Realidad Argentina y Latinoamericana (Ieral), de la Fundación Mediterránea, dijo que el empleo público es mucho mas numeroso en las provincias que en la Nación.
El empleo público creció en forma desmesurada en los dos niveles de gobierno. En el conjunto de las provincias, en 20 años el empleo público provincial subió cerca del 70% cuando la población lo hizo 25%. "Es decir, la suba del empleo público casi triplica el aumento de la población" dijo Capello.
Capello sostuvo que el crecimiento de la planta de personal se dio mas fuertemente entre 2003 y 2015, luego se morigeró en los años de Macri y se volvió a acelerar en la administración de los Fernández, Alberto y Cristina.
En un país que no genera empleo privado desde hace veinte años, el empleo público es la gran industria nacional, que justifica que el país no crezca y siga postrado en el crecimiento de la pobreza y la indigencia.
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