ENERO TERMINA Y FEBRERO EMPIEZA...!CON EL CONGRESO... SESIONANDO!

 


Por Eduardo Menescaldi (#)

Historia pura e inédita en las cuatro décadas de democracia que vive la Argentina. Todo hace suponer que desde el martes 30 de enero hasta el jueves 1 primero o incluso el viernes 2 de febrero, el Congreso va a sesionar para tratar la llamada ley ómnibus.

El oficialismo, de la Libertad Avanza, va a intentar que se logre la aprobación del megaproyecto con mas de medio millar de artículos -recordemos que en un principio eran mas de seiscientos sesenta- que significa una revolución cultural, política, social, económica y demás en la historia de nuestro país.

Genera adhesiones y rechazos, consensos y disputas, mas allá de la actitud habitual del kirchnerismo y la izquierda de oponerse a todo, cuando en el caso de los K son los principales responsables de la llegada al gobierno del disruptivo Javier Milei.

Otros sectores políticos tienen sus adhesiones y sus rechazos, incluso sus propuestas de modificación, muchas de las cuales han recibido el visto bueno del gobierno.

Así las cosas todavía falta que se definan principalmente el radicalismo, el sector que lidera Miguel Angel Pichetto y la Coalición Cívica, porque el PRO ha dicho que en general va a apoyar la iniciativa y quizás tenga alguna objeción en particular.

Precisamente, el dictamen que se envió al recinto resume el pensamiento del Poder Ejecutivo con una importante cantidad de modificaciones, sugeridas por la oposición y que fueron aceptadas.

La sesión, cuyo comienzo está previsto para el próximo martes, promete ser tan maratónica como histórica, por la magnitud de la iniciativa en consideración y por el momento calendario del debate (hace mas de dos décadas que el Congreso, en particular la Cámara de Diputados, no sesiona en esta fecha estival). En el Senado hay la posibilidad de una sesión especial para tratar el DNU que envió el Poder Ejecutivo.

Si la sesión de Diputados se extiende, con sus intervalos lógicos, entre martes y jueves o viernes entrará en la historia de los debates parlamentarios. Menudo trabajo de legisladores, empleados, taquígrafos y demás referentes ligados a la llamada Cámara Joven.

El gobierno está pendiente del resultado del tratamiento, sabiendo que se encuentra en una encrucijada. Mas allá de alertar sobre la necesidad de tener esta herramienta -que se le ha dado a todos los gobiernos democráticos apenas asumidos, empezando con la delegación de facultades- Javier Milei y gabinete sabe que está jugando fuerte en una apuesta que puede ser a cara o cruz, a todo o nada. 

En este sentido el presidente tendría que emplear mas la cintura del consenso para evitar males mayores, sobre todo con los gobernadores provinciales y sus representantes en el Congreso.

Es cierto que ya logró el apoyo de tres legisladores tucumanos, imbuidos del espíritu que les transmitió el gobernador Osvaldo Jaldo -conforme con la respuesta el gobierno ante los reclamos de la provincia- pero no puede dejarse llevar por el espíritu crítico y lanzar diatribas a quienes no se quieran subir a la ley ómnibus. 

Sabe Mile que nunca tendrá apoyo de los K, Unión por la Patria o la izquierda, por eso debe pescar en el mar profundo de otros sectores parlamentarios, con algún anzuelo que permita lograr el objetivo de la pesca.

Enero está cerrando su calendario y febrero prepara su traje. Mientras esto ocurre el Congreso en general, y Diputados puntualmente, se van a transformar en los actores del escenario político y legislativo que se viene. 

Los debates que se observaron en el plenario de comisiones -Legislación General, Presupuesto y Hacienda y Asuntos Constitucionales- se replicarán con mayor intensidad en el recinto. Y junto al calor de un verano que está teniendo altas temperaturas el clima político se va a calentar aun mas, con la incertidumbre, la ansiedad, la preocupación y el sueño de grandeza que merece un país que advierte que está viviendo una encrucijada virtual (Jorge Liotti dixit).

Ojalá que todos los protagonistas pisen el escenario a la altura de los espectadores, que son los millones de argentinos que miran el espectáculo y que espera una respuesta democrática y madura de sus representantes.

(#) Periodista y ex integrante del cuerpo de taquígrafos de la Cámara de Diputados de la Nación.

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