Vivimos las vísperas. Hoy sábado estamos a horas apenas de la asunción del nuevo presidente de los argentinos, Javier Milei, en coincidencia con las cuatro décadas de la vuelta de la democracia, cuando asumió el presidente Raúl Alfonsín aquel 10 de diciembre de 1983.
Mañana es el dia D. Asume un presidente disruptivo y outsider, que guarda en su torno un gran enigma. Desde ya el acto de asunción será muy diferente a los anteriores. Porque Milei va a dar un discurso ocasional ante la asamblea legislativa y luego hablará desde las escalinatas del Congreso ante la gente.
Se ha pedido a los argentinos que se acerquen a saludar al nuevo presidente con banderas celestes y blancas, y que lo acompañen en el trayecto hasta la Casa de Gobierno.
La inquietud, léase incertidumbre, pasa por conocer todo lo que viene, desde el precio del dólar, el paquete de medidas que enviará el Ejecutivo, la reacción de la gente, la resistencia de los piqueteros, CGT, detentores de planes sociales, etcétera...
¿Qué pasará el lunes con todos los productos y los precios que estarán condicionados por el nuevo precio del dólar oficial, que dicen que estará cerca de los 800 pesos, o sea una devaluación del 100 por cien?
El domingo 10 de diciembre de 2023 se va a constituir en un día histórico por donde se lo mire, con mega coberturas de los medios del país y del exterior, con la presencia de lideres del mundo, aunque en algunos casos sorprendentes, como el de Ucrania, Selenski, o el ex presidente de Brasil, Jair Bolsonaro -el actual Lula no quiso venir-, el que manda en Hungría, el canciller de Israel, etcétera, lo que obliga a un gran operativo de seguridad para evitar la acción de cualquier desquiciado.
El cierre del domingo será la tradicional velada del Teatro Colón, con la ópera Madame Butterfly, con el presidente electo y las nuevas autoridades (curiosamente ya vio esta ópera Milei, oportunidad en que hubo unos pocos desubicados que lo insultaron).
Milei armó un gabinete variopinto, con nueve ministerios -entre ellos el de Salud, a pesar de que en algún momento se habló de Secretaria dentro del novel Ministerio de Capital Humano- y con la llegada de algunos ilustres desconocidos y con la permanencia de otros que ya vienen del gobierno anterior.
Trascendió periodísticamente un encuentro del domingo 3 entre Javier Milei y Sergio Massa, lo que habla a las claras de que no habrá tanta campaña anticasta como se anunció en la campaña. De todas maneras, hay esperanza en los días que vienen y el tiempo dirá la última palabra.
Lo importante es que el kirchnerismo está en retirada e incluso lo vive o lo sufre Quilmes, porque parece ser que la buena onda que hay entre Máximo, el hijo de CFK y la camporista Mayra Mendoza determinó que Cristina decida sacar el monumento a Néstor del CCK y llevarlo al polideportivo de nuestro distrito. Arguyen que se corría el peligro de vandalismo contra el monumento, lo cual parece un despropósito de los propios K que no se bancan la tremenda derrota que sufrió su candidato, el economista que falló en todo, Sergio Tomás Massa. El que por Rivadavia, con esa sonrisa irónica, anuncia en varias esquinas que se viene la Argentina "que estabas esperando". ¿Será dentro de cuatro años... o la concretará ahora Javier Milei?
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