Por Eduardo Menescaldi
El oficialismo se encargó de multiplicar por todo el país lo que se llamó "la campaña del miedo", dando una serie de alertas si el domingo gana Javier Milei.
Sergio Massa se ha convertido en el salvador, cuando en su carrera cuenta con muchísimos motivos para entender que algo de miedo se debe tener si termina ganando. Solo con detallar todo lo que realizó desde agosto del año pasado en materia económica, basta para tener un poco de miedo. A lo que habría que sumar sus volteretas políticas que lo han puesto en todas las veredas, desde el kirchnerismo hasta el antikirchnerismo, cuando decía suelto de cuerpo que iba a barrer con los ñoquis de la Cámpora y que los K... nunca mas.
Pero el hombre, que hace del poder un culto, suele ser pragmático y maquiavélico: el fin justifica los medios. Y con tal de llegar al poder no escatima recursos, incluso haber financiado la campaña de Milei (y Espert) en su momento como reconoció el hoy aliado del hombre de Tigre, Carlos Maslatón.
Frente a la campaña del miedo que alienta el massismo-peronismo-kirchnerismo hay otra campaña del miedo que alienta un sector de la oposición, que se puede resumir simplemente en el miedo a no hacer las cloacas que te prometieron... Son cuatro décadas de democracia, con el peronismo en el mayor porcentaje y el kirchnerismo en el 40 por ciento del tiempo transcurrido.
Ante esta radiografía, el domingo 19 se ha transformado en un choque de miedos, como para que la República y la democracia vivan de susto en susto.
Entre dos candidatos que no entusiasman ni tienen alma de líderes, ¿qué decidirá el ciudadano para los próximos años, continuismo o cambio?
Lo cierto es que hoy como nunca desde la vuelta de la democracia se viven todos los miedos, paradójicamente... por las campañas del miedo...
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