El martes 7 de noviembre el Centro Nueva Tierra y la Secretaría de Derechos Humanos de la provincia de La Rioja entregarán el premio "Angelelli 2023" a la diócesis de Quilmes en el marco de los 40 años de la democracia, como reconocimiento a las personas y comunidades.
Según los organizadores este reconocimiento busca rendir homenaje y destacar a los que con admirable dedicación se ocuparon de "la noble tarea de forjar, la memoria y la justicia de los compañeros que padecieron como víctimas del terrorismo de estado".
La entrega será el 7 de noviembre a las 18 en la Casa de la Provincia de La Rioja en la Ciudad de Buenos Aires, Callao 745, CABA.
El secretario de derechos humanos de la provincia organizadorea explicó que "se busca celebrar lo que significa la defensa permanente de los derechos humanos, con el combate cultural desde la perspectiva de los derechos humanos, porque la democracia no
En este homenaje, junto a la diócesis de Quilmes también serán reconocidos la señora Estela de Carlotto, Adolfo Pérez Esquivel, Lola Llorente, Victoria Montenegro, Francisco Oliveira, León Gieco, Rubén Dri, la comunidad de la parroquia de Santa Cruz, la familia de Emilio Mignone, Hermanas de la Asunción, Hermanas del Divino Maestro y familiares y compañeros de los 12 de la Santa Cruz.
El acto estaba previsto para el 17 de agosto y fue postergado por motivos climáticos.
Vale recordar que el obispo de La Rioja, monseñor Enrique Angelelli, fue asesinado por la dictadura militar el 4 de agosto de 1976 en Punta Llanos. Se quiso hacer aparecer el hecho como un accidente automovilístico, cuando en realidad fue un atentado con la acción del general Menéndez y del comodoro Estrella, quienes finalmente fueron condenados a cadena perpetua después de una larga investigación.
La diócesis de Quilmes tuvo una especial acción en los pasos para canonizar a monseñor Angelelli, con la gestión del hoy arzobispo de Mendoza, antes de Orán y La Rioja, monseñor Marcelo Colombo.
Por eso, el reconocimiento a la diócesis de Quilmes, que fue creada por el Papa en 1976, con el primer obispo, monseñor Jorge Novak.
Monseñor Angelelli, conocido cariñosamente como El Pelado, se destacó por su defensa de los derechos humanos, la voz de los sin voz. Nacido en Córdoba, en La Rioja desplegó una enorme acción por las comunidades agrícolas con la defensa de los derechos de los habitantes, con la reforma agrícola.
Su prédica encontró la oposición del gobierno constitucional de los 70 encabezado por el entonces joven gobernador, Carlos Menem y después, por la dictadura militar, que se sentía atacada por la gestión del obispo y que concluyó con este trágico desenlace.
Alguna vez le hicimos una nota a monseñor Angelelli, poco tiempo antes de su asesinato y dejó picando una frase dirigida al poder y al centralismo porteño: Ustedes tienen luz de mercurio en los ojos y asfalto en el corazón.
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