DOMINGO DE BALOTAJE: INCERTIDUMBRE, EXPECTATIVA, ANGUSTIA...

 Se viene el Domingo 19 de noviemb, el día D para definir el futuro del país: mañana es el esperado balotaje entre los dos candidatos, Sergio Massa y Javier Milei.

Dos maneras distintas de encarar el gobierno a partir del 10 de diciembre, aunque quizás la gran verdad y coincidencia pase por entender que muchos van a votar a uno para que no gane el otro, aunque ninguno de los dos satisfaga en forma mínima sus ideas.

No son los mejores, en todo caso son los únicos que quedaron en carrera después de las PASO y de las generales.

Encrucijada argentina ha sido la mejor definición para sintetizar lo que va a ocurrir mañana.

Por un lado, está el oficialismo que pretende el continuismo. Por el otro, la oposición que apuesta a un cambio verdadero.

Dos maneras diferentes, vale repetirlo, de encarar lo que viene en el país.

El oficialismo apostó todas sus baterías a hacer entender a la ciudadanía que una victoria de la oposición será un salto al vacío, y para ello se apostó a la denominada campaña del miedo, dando a entender que si gana Milei será el caos.

Mientras que Milei, que se cansó de hablar de terminar con "la casta", dejó dudas en cuanto a lo que significará un eventual gobierno suyo, porque habló de medidas disruptivas y sobre el final las suavizó. Incluso en un video desmintió una serie de expresiones, que alguna vez anunció, en cuanto a privatizaciones, anulaciones, etcétera.

Lo cierto es que la Argentina vive un domingo especial, quizás el mas importante de las cuatro décadas de democracia. 

De aquí en mas la Nación será diferente, incluso con el triunfo del oficialismo, porque Sergio Massa adelantó que su gestión será diferente a la actual, como si no fuera responsable de lo que ha pasado en los últimos años en el país.

Hay incertidumbre, expectativa, angustia, ansiedad... todos los términos y sensaciones habidos y por haber que mañana a la noche podrán disiparse. 

Ojalá que haya una definición clara en favor de uno u otro, porque un eventual empate o diferencia mínima seguramente va a generar una posibilidad de judicializar el resultado, lo que literalmente será un problema mas a una República que quedará al borde del abismo. 

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