ASAMBLEA PLENARIA DE LOS OBISPOS ARGENTINOS: HOMILIA DE MONSEÑOR TISSERA

 

                                                             Monseñor Tissera


En la segunda jornada de las 123 Asamblea Plenaria de los obispos argentinos, el titular de la diócesis de Quilmes, monseñor Carlos José Tissera presidió la misa de la mañana junto a los obispos de la Comisión Episcopal para Cáritas Argentina, Gustavo Carrara y Roberto Alvarez.

En su homilía el obispo Tissera recordó las bodas de Caná, que anuncian un momento en la vida de Jesús y de María. "Allí experimentará la mas radical pobreza, el supremo desprendimiento. También allí se sentirá hondamente solidaria con su hijo, dando la vida por la vida del mundo. Otra vez, María enseñando cómo amar a los pobres.

En la sinagoga de Nazareth, Jesús se presentó a sus paisanos en cumplimiento de la profecía de Isaías: El Espíritu del Señor está sobre mí, porque me ha consagrado para la unción. El me envió para llevar la buena noticia a los pobres.

Jesús, pobre y humilde, hizo amistad con los pobres, caminó con los pobres, compartió la mesa con los pobres y denunció las causas de la pobreza. Para la Iglesia la opción por los pobres y los descartados antes que una categoría cultural, sociológica, política, filosófica, es una categoría teológica.

El Magisterio de la Iglesia Latinoamericana, nacido de la experiencia de la fe de nuestras iglesias, nos regaló preciosas definiciones que iluminan la vida de nuesro pueblo creyente. 

Basta citar el documento de Aparecida: La opción preferencial por los pobres es uno de los rasgos que marca la fisonomía de la Iglesia Latinoamericana y caribeña. Los rostros sufrientes de los pobres son rostros sufrientes de Cristo.

La opción por los pobres debe conducirnos a la amistad con los pobres.

Por gracia de Dios, me toca acompañar pastoralmente la diócesis de Quilmes. Su primer pastor fue el Siervo de Dios Padre Obispo Jorge Novak. Algunos de ustedes lo han conocido, además de catedrático fue un misionero incansable, amigo de Dios y de los pobres. 

Decía visitando una parroquia: Queremos ser la Iglesia de los pobres, la Iglesia para los pobres. Pero sin sectarismos y sin falsos mesianismos, sin ideologizaciones. Nos remitimos al juicio de Dios, que conoce nuestras intenciones y nos da la fuerza de su Espíritu para el cumplimiento de la misión confiada.

Optar por los pobres representa para la Iglesia una exigente conversión. Un cambio cuyo rigor no tolera recaídas ni actitudes mediocres o ambiguas. Las consecuencias serán inevitables: habría incomprensión, se hará el vacío; arreciará la persecución, nos ha brindado ya múltiples ejemplos de hombres y mujeres que hicieron de la docencia evangélica un libro de vida... uno de estos hombres fu,e el obispo de La Rioja, monseñor Enrique Angelelli.

Que María Medianera de las Gracias, y tantas santas y santos, nos ayuden a amar a Dios y a los pobres, dos caras de una misma moneda.

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