Las urnas dirán esta noche qué decisión tomó el pueblo argentino, al menos en su primera minoría, en cuanto al futuro.
Cinco protagonistas se disputan la candidatura a presidente pero todo hace suponer que hoy no habrá definición de victoria en primera vuelta, por lo que habrá que esperar hasta el domingo 19 de noviembre para saber cuál de los dos mas votados disputan la final.
El canal Crónica juega a las adivinanzas y de pronto se anima a hacer pronósticos con lenguaje animal. Y adelanta que por ahora manda el tigre con el 28 por ciento de los votos, el león 27 por ciento y el pato 25.
No hay que ser demasiado ingenuo para darse cuenta que, de ser ciertas las cifras que se manejan a boca de urna, la sorpresa la daría el ministro, candidato, autor del plan platota con 3 billones de pesos para la campaña, Sergio Massa.
Luego, Javier Milei, quien se presenta en los actos como el león y ruge -si pasa a ocupar el segundo lugar se daría un repliegue del rey animal, podría ser por el zig zaz que mostró en los últimos tiempos y las polémicas que protagonizo.
Y en el tercer lugar, Pato Bullrich, quien quedaría afuera del balotaje y se convertirían sus seguidores en árbitros del partido final.
Claro está, estos elementos están tomados de los cabellos de un canal como Crónica, que siempre manifestó una inclinación especial por el kirchnerismo (lo mismo que C5N).
Si todo esto se comprueba esta noche, quedarán 20 puntos que se repartirán Juan Schiaretti y Myriam Bregman, por Hacemos por la Nación y el Frente de Izquierda, respectivamente.
Por ahora hay que esperar que sigan corriendo las horas -el comicio se cierra a las 18 y quienes estén en los locales de votación a esa hora podrán emitir su derecho cívico- y seguramente después de ese momento del crepúsculo comenzarán a rodar las versiones sobre el acto comicial, que recién podrán tener comprobación oficial sobre las 21 o 22.
Mas allá de lo que hoy se juega en las urnas, en este año de las cuatro décadas de democracia sin interrupciones, lo fundamental es que el país encuentre un rumbo. Y si bien no habrá una definición hoy, dejando todo librado a mediados de noviembre, lo fundamental es que cada candidato asuma su responsabilidad y trate de buscar los motivos por los que fue votado o no.
De todas maneras, con el colectivo del canal Crónica, la primera presunción es que no habrá ganador en primera vuelta -lo que hubiera sido un batacazo- y parece que tampoco habrá algún candidato que supere la cifra del 30 por ciento
Hay que recordar que al haber tres potenciales candidatos, es un panorama de tres tercios. Y la gran incógnita pasa por saber cuántos electores se sumaron en estas elecciones, en comparación con las PASO. Porque aquella vez del 13 de agosto hubo 11 millones que no fueron a votar y hoy se supone que muchos de ellos si lo hicieron o lo harán.
Mañana lunes la República se despertará con otro clima, aunque parece que la incertidumbre seguirá siendo la que tenga mayor potencia de gobierno. Porque hoy Clarín decía que se votaba entre la continuidad y el cambio. Y si los números ocurren como dice Crónica, la continuidad tendrá mayor porcentaje que las otras dos fuerzas que alientan el cambio con distintos métodos. Un panorama que hace de la incertidumbre una moneda difícil de cotizar.
Vale recordar que en su momento, cuando iba por una nueva elección frente a Néstor Kirchner, Carlos Menem tuvo algo mas del 22 por ciento. Se ubicó primero pero finalmente el riojano desertó porque veía venir que la mayoría del 78 por ciento restante le iban a votar en contra.
Aquí las cosas serán diferentes (o no porque muchos dicen que Milei es Massa con otros métodos) y entonces el tiempo dirá cómo se encamina el futuro institucional del país.
Hay que esperar los números y tener esperanza en los días que vienen..
EL PARLAMENTO
En base a las presunciones y a lo que se respira en el ambiente, lo que viene en el parlamento nacional será un cuerpo de varias fuerzas con importantes representaciones. Seguramente la Libertad Avanza tendrá un número trascendente, lo que hará que el oficialismo y la principal oposición vean una reducción en sus bancadas. O sea, lo que se prevé es que se viene un Congreso de consenso para poder sancionar las leyes que el futuro Ejecutivo considere fundamentales.
El Parlamento, entonces, tomará el protagonismo que últimamente no ha tenido con escasa cantidad de sesiones y muchos obstáculos para lograr consensos.
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