En estos días pasarán cosas en el país que seguramente pondrían en jaque a los grandes próceres de la historia nacional (hablemos de Sarmiento, San Martín, Belgrano...).
Porque el lunes llegan al país presidentes de tres países que se dicen democráticos pero que se destacan porque cooptan la justicia, la prensa, la libertad ...Se trata de Miguel Díaz Canel, de Cuba; Nicolás Maduro, de Venezuela y Daniel Ortega, de Nicaragua.
La vocera presidencial, Gabriela Cerruti, dio cuenta de una especial versión de su manera de entender la demcorsacia, porque sin ponerse colorda anunció que el miércoles 25 de enero el presidente de la Nación, Alberto Fernández, va a recibir a su par de Cuba, Miguel Díaz Canel, que llegará al país para participar del encuentro de la CELAC (Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe). Encuentro en el que también estarán los presidentes de Venezuela y Nicaragua.
Se sabe que en Venezuela los derechos humanos no se respetan y por eso es que hay millones de venezolanos fuera de su país, entre ellos una cifra que orilla el medio millón en la Argentina.
Y Nicaragua es la catedral del autoritarismo, porque los candidatos de la oposición son puestos presos para no participar en los comicios.
Con estos datos y antecedentes, la vocera Cerruti dijo que los presidentes que vienen al país fueron elegidos por sus pueblos, todo un eufemismo en los casos Cuba, Venezuela, Nicaragua.
Por todo ello, el kirchnerismo se muestra muy empático con estos regímenes, porque no debe olvidarse que este Alberto Fernández -no aquel de antes de ser elegido a dedo como candidato por Cristina Kirchner- alguna vez le dijo a otro dictador como Vladimir Putin, de Rusia, que tenía las puertas abiertas del país para su régimen. Y lo mismo ocurre con Xi Xinping, otro dictador de la China multipoblada.
Así las cosas el encuentro de CELAC, en Buenos Aires, es una nueva grieta a las tantas que el kirchnerismo supo alentar desde que está al frente de las riendas de la Nación (dieciséis años de los últimos veinte).
Seguramente muchos venezolanos le harán conocer a Nicolás Maduro su pensamiento y su repudio, como podrá ocurrir también con cubanos que debieron irse de su país por el régimen autoritario que empezaron los Castro -Fidel y Raúl- y que hoy detenta Díaz Canel.
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