Monseñor Carlos Tissera, obispo de Quilmes, envió el mensaje ante la próxima Navidad y destacó el logro de los futbolistas argentinos ,campeones del mundo, abogando por tomar el ejemplo de los deportistas que movieron y conmovieron a todo un país.
En el principio el obispo dejó un mensaje del Evangelio de Lucas: No teman porque les doy una buena noticia, una gran alegría para todo el pueblo.
De esa fuente de amor, que es Dios mismo viviendo con nosotros, nacen muchos bienes buenos que no se contabilizan, no se cotizan. Bienes que llenan la vida de nuestro interior, son los valores que nos humanizan y nos hermanan con los demás.
La alegría que vivimos todos los argentinos por lo realizado por el seleccionado nacional demuestra que nos une no solo el deporte sino el sentido de la fraternidad, de la solidaridad y de celebrar en familia.
Son pequeñas grandes cosas que están vivas en ocasión de ganar un campeonato mundial de fútbol, y que hace que florezcan y se expresen. Eso mismo nos une y nos inspira.
Sabernos de un pueblo que lucha cada día por más dignidad, que soporta muchas privaciones e injusticias, pero que no baja los brazos.
Ese pueblo sabe ver en la campaña del puñado de jóvenes futbolistas los valores, que abrazan la unidad y trabajan para superar las dificultades, con la alegría de la amistad, el amor, el deporte, la sencillez, el compañerismo y otros valores apreciados por todos.
Saquemos provecho de esta alegría futbolera para nuestra vida cotidiana, la de nuestras insticiones y sus dirigencias para encontrar juntos mejores cosas de justicia y dignidad para nuestro pueblo.
En esta Navidad como Iglesia nos alegramos de la buena nuev a con la llegada del nuevo obispo auxiliar, Eduardo Redondo, quien ya se encuentra con los sacerdotes y está en Argentina, completando su labor en el seminario de Huancayo, Perú, vía internet.
Luego de realizar sus ejercicios espirituales, será ordenado obispo el 17 de febrero a las 19 en la catedral.
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