Por Eduardo Menescaldi
Diciembre, un mes especial en nuestra querida Argentina. Hay una cuestión que parece superar la grieta y que ha logrado unir a los habitantes de este país: la selección nacional.
El equipo de fútbol, que conduce Lionel Scaloni y que tiene como principal figura a Lionel Messi, ya se encuentra en cuartos de final del mundial que se está disputando en Qatar.
El viernes próximo a las 16, hora de nuestro pais, la selección albiceleste enfrentará a Países Bajos (Holanda), en un partido decisivo para pasar a semifinales.
Cada vez que juega la selección hay multitudes que siguen los encuentros por televisión y que después de los resultados favorables se encuentran para festejar en lugares emblemáticos, como el Obelisco de Buenos Aires o en las grandes capitales de todo el país, también en las pequeñas ciudades.
Ese espíritu de encuentro y de estar juntos ha sabido superar muchas barreras. La selección logra lo que muchos políticos no han podido en estas cuatro décadas de democracia.
Pero diciembre no solo es futbol. En todo caso, este deporte une y reúne a multitudes con un mismo grito: !Argentina!-
También un país, una serie de cuestiones que hacen a la vida cotidiana de todos. Y no puede estar ajena a todo esto la materia política, hoy muy ligada con el rubro judicial.
En este sentido, el próximo martes 6 de diciembre no será un día más para la República. Enorme expectativa genera conocer la decisión del Tribunal Oral Federal Nro. 3, que a las 18 dará a conocer la sentencia en la causa de Vialidad en la que está involucrada la vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, junto a otros imputados.
Una importante avalancha de pruebas dieron a conocer los fiscales Diego Luciani y Sergio Mola para terminar solicitando doce años de prisión para la vicepresidenta.
Curiosamente la acusada, a través de sus abogados y de sus propios alegatos, se la pasó diciendo que era una operación mediática y judicial, habló del partido judicial, etcétera, etcétera, y no aportó ningún elemento de defensa para contrarrestar las acusaciones y las pruebas.
Incluso, los partidarios de CFK se la pasaron anunciando medidas para repudiar lo que entienden será la condena de la vicepresidenta.
Desde convocatorias a cortar rutas hasta llamados a movilizaciones, convocatorias a sindicatos y representantes del oficialismo para pedir la renuncia de los integrantes de la Corte, todo se arma para enfrentar una decisión judicial, quebrando los principios de la República, cuyo pilar es la división de poderes.
No será un martes igual a todos los demás. Por el contrario, se anuncia un día histórica, como sería que por primera vez en la Argentina se condene a una vicepresidenta de la Nación, dos veces presidenta.
Ojalá se respete la decisión judicial y se entienda que el sistema democrático no puede embarrarse con actitudes de quienes parecen estar decididos a poner en peligro el funcionamiento de la República.
El fútbol, la política, la justicia, tres protagonistas de un diciembre especial en la querida Argentina.
Ojalá que el fútbol siga dando alegrías -se sabe que ahora los partidos son a todo o nada- y también vale esperar que la decisión judicial sea respetada como corresponde en un sistema democrático.
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