Los "K" parecen haberse puesto de acuerdo para echar a rodar una especie, que resulta digna de cavernarios o primitivos,
El sentido común no parece haberse instalado en estos personajes, que no van a hablar de la corrupción, de la inseguridad, de la pobreza, de la desocupación, de la economía, del dolar, de la industria del empleo público que estalló en los medios con la referencia al gobernador de Buenos Aires y la cantidad de empleados que ingresó en la provincia... y de tantos males que encierra el gobierno que defienden para hacer creer a la gente que la derrota de la Argentina con Arabia Saudita se debió a la presencia del ex presidente Mauricio Macri en Qatar, porque ahora quieren demostrar que Macri "es mufa".
Cuando Gregorio de Laferrere escribió "Jettatore" no imaginó que la problemática del personaje, que alguna vez interpretó Pepe Arias, podría instalarse hoy en nuestro país, ligada al mundial de fútbol.
El encuestador Artemio López, hipercristinista, lo dijo en las redes, alertando que Macri va a estar el sábado en el partido con México, como si eso fuera incidente en el resultado del encuentro.
En el mismo sentido, se manifestaron el profesor y supuesto periodista, Javier Romero, el impresentable de Luis D´Elía y el intendente de Pehuajó, Pablo Zurro (qué mal que le hace este político a la tierra de Manuelita, la tortuga, el personaje que inmortalizó María Elena Walsh).
Página 12, un medio ultrakirchnerista, sigue con la telenovela de Macri mufa, aunque no dice nada que su dueño, el sindicalista de los encagados, Santamaría, está en Qatar disfrutando del mundial. Un sindicalista dueño de medios, que ratifica aquello de los que hicieron fortunas con el gobierno.
Todos estos comentarios, como esa página que tiene mijles de seguidores pidiendo que Macri se vaya de Qatar porque "es mufa", representan la mediocridad llevada al paroxismo, que alguna vez denunció el excelente escritor José Ingenieros, con su inmortal obra "El hombre mediocre".
No hay nada que hacerle: hechos como los descriptos solo refieren al grado que puede llegar la estupidez humana.
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