EN VISPERAS DE SEMANA SANTA, LA REPUBLICA TIENE OFICIALISMO Y FUEGO AMIGO

 El secretario de Comercio, Roberto Felletti, se encargó de criticar a su par, el ministro de Economía de la Nación, Martín Guzmán, y dijo que si Economía no toma las medidas que corresponden "esto se va a poner feo".

Oficialismo y fuego amigo siguen cruzando expresiones que ponen el acento en el desconcierto que existe en la República y lo que va a venir. 

Porque por un lado el ministro Ferraresi habla de que todos los números de la economía están siendo positivos y por el otro, el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, alerta que si hay ajuste las cosas se van a poner peor, porque "el Conurbano no resiste más".

Para poner más leña al fuego, en una sesión exprés el Senado nacional aprobó hoy por mayoría -37 a 32- el proyecto de ley que deja al presidente de la Corte Suprema de la Nación fuera del Consejo de la Magistratura. De todas maneras se corre contra el tiempo porque el plazo para sancionar esta ley vence el 15 de abril, y todavía debe aprobarlo Diputados, donde el oficialismo por el momento no tiene la mayoría. Además se está prácticamente sobre el término, todavía no se conformaron las comisiones en la Cámara Baja y se hará difícil llegar a ese día 15, y no hay que olvidar que la próxima es la Semana Santa.

Como respuesta la Corte no hace lugar a recursos presentados por Lázaro Báez y Julio De Vido, entre otros ex funcionarios kirchneristas.

Por otra parte, un tribunal condenó  por corrupción al ex gobernador de Entre Ríos, Sergio Urribarri, a ocho años de prisión (se trata del actual embajador en Israel y Chipre).

Todos estos condimentos le ponen un sabor especial a la situación política e institucional del país. 

La grieta que se muestra entre los Fernández -el presidente y la vice, que no se hablan desde hace varios días- es otro ingrediente que complica la situación y que pone el alerta sobre el futuro del país.

Ojalá que los que mandan tomen conciencia de la realidad que está viviendo la Argentina, y que como siempre impere el consejo que en su momento dio Ortega y Gasset, con su "Argentinos, a las cosas", algo que por ahora parecen no tener en cuenta y se dejan llevar por sus mezquindades personales.


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