Después de superar una lista importante de oradores, hoy a la medianoche se espera que el Senado de la Nación -esta vez vallado para evitar males mayores como ocurrió en Diputados- apruebe el proyecto de ley de acuerdo con Fondo Monetario Nacional. De esta forma, según adelantó el presidente de la Nación, desde mañana se iniciará "la guerra" contra la inflación, sin duda otra torpeza del primer magistado porque hacer una analogía con la situación que vive Ucrania con la invasión rusa parece un despropósito, aunque se sabe que Alberto Fernández ha ido escalando despropósitos desde que asumió su cargo.
¿Qué pasará a partir de este acuerdo? Todo hace suponer que se agrandará la grieta en el gobierno bifronte que hoy tenemos, algo que es inédito en la historia democrática argentina y que tiene pocos parangones a nivel mundial.
Hoy los Fernández mantienen distancias importantes sobre el futuro, y si bien se desconoce si alguna vez aparecerá un plan de gobierno, la realidad es que la vicepresidenta en el Senado y su hijo en Diputados son los elementos fundamentales de rechazar el acuerdo, a tal punto que Máximo Kirchner dejó la presidencia del bloque y recién votó el acuerdo en forma negativa en la madrugada, junto al barbijo para tapar el inconveniente que le producía la decisión.
Y su madre, que armó un acting con el repudiable atentado contra su despacho -la realidad es que hubo otros despachos apedreados- y dejó picando la sensación de que armar un relato, algo tan afín al kirchnerismo, no es tarea difícil para el kirchnerismo.
Alberto Fernández dijo que una vez "liberado" de la mochila del acuerdo, vendrá el tan esperado plan para combatir la inflación, con una serie de medidas, que seguramente afectarán sobre todo a la clase media. Algunos indicios ya se han vivido, como el aumento de la nafta, la variación de precios, en fin, condimentos para que a los 4,7 puntos que dio el INDEC en febrero se les sumen otros tantos en marzo, el mes de la escuela, las prepagas, las paritarias, etcétera.
No puede faltar en este comentario algo relativo al conflicto que se está viviendo en Ucrania, después de la incomprensible invasión rusa, de ese personaje llamado Vladimir Putin, que en algunos lugares se lo compara nada menos con Adolf Hitler y la segunda guerra mundial.
Como contrapartida apareció en estos días el líder de Ucrania, Zelensky, un artista y cómico que desde el liderazgo político del país invadido se convirtió en un emblema de la defensa de la libertad ante el atropello que están sufriendo sus compatriotas. Zelensky habló en forma virtual con el parlamento inglés, y recordó a Shakespeare y a Winston Churchill, y ayer lo hizo con los legisladores de los Estados Unidos, a quienes les recordó el bombardeo de Pearl Harbor y el trágico 11 de setiembre de 2001 con el derrumbe de las Torres Gemelas.
El líder instó a los europeos a moverse y conmoverse con el drama ucraniano, que superó los tres millones de refugiados, que inundaron los países vecinos, fundamentalmente Polonia, también Hungria, Rumania, Moldavia, Turquía.
Las imágenes que llegan de la ciudad fronteriza por excelencia, Lviv, con varios periodistas argentinos mostrando la realidad de la guerra son conmovedoras y hacen suponer que el mundo está en peligro y en vilo, y que si la pandemia produjo una nueva normalidad, después de dos años, ahora este conflicto puede transformarse en una nueva "pandemia" de humanidad, entre dos maneras de sentir y de vivir. Incluso si se reduce la situación a lo elemental, parece que está en juego la libertad por un lado y la autocracia por el otro.
Frente a ello la posición argentina es preocupante, máxime si se recuerda que a un paso de la invasión, el presidente Fernández estuvo en Moscú -más tarde en China- y prácticamente se mostró condescendiente con Putin, al punto de llegar a decirle que la Argentina podía ser la puerta de llegada de Rusia a América Latina, expresión que hoy parece un enorme despropósito, teniendo en cuenta que el líder de Estados Unidos, Joe Biden, calificó a Putin como "criminal de guerra".
Lo que está en observación es la posición de otra potencia, China, cuyo máximo líder por ahora se ha mostrado neutral, aunque se sabe que en su momento estuvo reunido con Putin, incluso llegó a decirse que el líder chino Xi Jinping le pidió que postergara al invasión a Ucrania mientras se desarrollaban los juegos de invierno en el país chino.
Esta noche se aprueba el acuerdo con el FMI, habrá algo de alivio sin duda, pero de aquí en más desde el gobierno nacional habrá que tener la cintura necesaria para tomar medidas que permitan comenzar a mejorar la situación del pueblo argentino, que pide respuestas idóneas para que los índices de inflación, pobreza, desocupación empiecen a mejorar.
Oficialismo y oposición tendrán que buscar acercamientos por el bien del país, y superar las propias grietas que se muestran en cada sector, el kirchnerismo duro en el oficialismo y los halcones en la oposición. Para que la Argentina comijence a transitar el futuro de grandeza que merece por las riquezas naturales y humanas que tiene este país, sí, el mismo al que el artista Argentino Luna se encargó de definir con aquel histórico tema que es una expresión de lo que realmente se puede realizar: ¡Mire qué lindo es mi país, paisano...!".
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