Ocurrió hoy hace 25 años, aquel lamentable 25 de enero de 1997 en Pinamar, cuando aparecía asesinado el fotógrafo de la revista Noticias, de la Editorial Perfil, José Luis Cabezas. C El empresario Yabrán había sentenciado al profesional por haber sacado una foto de él con su esposa, María Cristina Pérez, en la playa. Yabrán había amenazado con ese desenlace quien se atreviera a publicar una foto suya. El periodista Gabriel Michi acompañaba en esa cobertura al fotógrafo Cabezas y publicó en su momento el libro Cabezas, un periodista, un crimen un país. En el libro, Michi cuenta cómo se consiguió la famosa foto. Era el empresario más buscado de la Argentina, nadie podía tomarle una foto y José Luis Cabezas lo logró en esa playa Marbella, de Pinamar. Yabrán, cuenta Michi, se jactaba de que nadie había podido fotografiarlo, incluso los servicios de inteligencia. Se publicó la foto en la revista con el título Yabrán ataca de nuevo. Por ese trabajo y esa foto, aunque cueste creerlo, el empresario armó una banda para asesinar a Cabezas. En el libro Michi dice que a José Luis lo mataron por su trabajo, por sus fotos y por la búsqueda informativa. "Su crimen fue un intento de silenciarlo a él y a toda la prensa. Que fue ordenado por un empresario poderoso en complicidad con su guardia pretoriana y con policías que trabajaban con delincuentes comunes y que gozaban de la inmunidad de las zonas liberadas. La famosa foto salió publicada en la revista del 3 de marzo de 1996 y en madrugada del 25 de enero del año siguiene apareció muerto el fotógrafo, secuestrado y quemado en su vehículo. El reportero gráfico quilmeño Sergio Pablos, que todos los años concurre a ese santuario y cenotafio en Pinamar para homenajear al colega brutalmente asesinado, publicó hoy esta profunda confesión: No conocía Pinamar. El asesinato de José Luis hizo que la conociera. No conocía Pinamar y hoy estoy volviendo. No conocía Pinamar, van 25 años del asesinato y todos están libres. No conocía Pinamar y es el acto Nro. 25. No conocía Pinamar y hoy estoy en camino por vigésimoquinta vez. No conocía Pinamar y querría haberla conocido en otras circunstancias. Yo no me olvido de José Luis. CABEZAS PRESENTE, AHORA Y SIEMPRE.
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