El árbitro Nicolás Lamolina confesó que anoche no pudo dormir, porque creyó que había estado acertado al cobrar el penal que significó la victoria de Quilmes sobre Ferro.
Y explicó que lo que había visto en la cancha era penal, pero después más tranquilo, observando las imágenes en su casa, reconoció que se equivocó. A partir de ahí pidió disculpas a la gente de Ferro y confesó que había tenido un error y lo reconocía.
El tema de este penal derivó en múltiples comentarios de todas las partes.
El presidente de Quilmes, Cristian Sterli, dijo que no hubo premeditación en la sanción y recordó el penalazo que le hicieron a Pavone en cancha de Brown y que no había producido semejante repercusión.
José Chatruc, ex futbolista y periodista deportivo, fue el único que dijo que había sido penal por entender que hubo infracción del arquero al delantero. Eso le costó múltiples críticas.
Como no hay otras competencias y el torneo de la Liga Profesional concluyó, el episodio en cancha de Quilmes se convirtió en el tema de la semana. Reiteramos, no fue tanta la repercusión como el penal no cobrado por Echenique al delantero Mariano Pavone en cancha de Brown. Aquel penal pudo significar que Quilmes terminara primero en su zona y pudiera jugar la final por el primer ascenso con Barracas.
El hecho de anoche explotó mucho más porque para Ferro significó la eliminación.
El penal se sigue discutiendo. El conductor de la Asociación de Arbitros, Federico Beligoy, sobre el penal dijo que "fue un error y nada más", y destacó que el nivel del arbitraje argentino tiene superávit.
El jugador Díaz, de Ferro, se quejó del arbitraje y no solo criticó el penal cobrado sino que dijo que hubo compañeros lastimados, con infracciones que a su entender merecían expulsión del jugador quilmeño que cometió la falta.
Pero Díaz reconoció que este hecho fue la gota que rebalsó el vaso porque a Ferro, a su entender, lo vienen perjudicando desde hace tiempo. Recordó el partido que jugaron con Barracas, también la falta de televisación del club de Caballito y el hecho de que a medida que fue creciendo en la tabla lo fueron ninguneando y terminaba jugando en último lugar en el orden de partidos.
Se seguirá hablando de la cuestión. Lo cierto es que el próximo martes a las 20.10 en cancha de Rácing, Quilmes juega el ascenso con Barracas Central. Solo falta conocer quién será el árbitro. ¿Loustau?¿Pitana?¿Echenique?¿Tello...? Habrá que esperar.
También habrá que ver qué cantidad de entradas se asigna a cada club, porque se sabe que Quilmes tendrá una gran compañía ...
CALELLO
Se llama Marcelo Calello. Fue presidente de Quilmes y se preguntó por qué este partido final se pasó al martes cuando se iba a jugar el domingo. Y agregó lo siguiente: ¿será para recuperar a Valenzuela, la joyita de Barracas?
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