La seguridad tiene dos responsables y los dos suelen pensar de distinta manera: el ministro de la provincia de Buenos Aires, Sergio Berni y su par de la Nación, Aníbal Fernández.
El tema de los mapuches en el sur del país generó cruces de mensajes.
Berni dijo que lo que está ocurriendo en la provincia de Río Negro era un hecho de inseguridad y requería la intervención del gobierno nacional porque era un hecho de terrorismo.
Le contestó Aníbal rechazando el argumento y sosteniendo que eran un pocos los que atentaban contra la seguridad y que se podía resolver con el gobierno local. Agregó que de ninguna manera podía ser considerado terrorismo.
Ahora Berni le respondió al quilmeño, con su habitual ironía: le recordó los millones que no votaron al oficialismo en las PASO y le dijo que había que tener en cuenta esa cuestión. "¿Lo sabe o le hago un dibujito?" remató Berni.
Evidentemente, desde el oficialismo hay distintas maneras de analizar un mismo tema, prueba elocuente del desconcierto que existe en las filas del kirchnerismo.
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