Se está terminando octubre, va a llegar noviembre, por lo que cada vez falta menos para el día D, domingo 14 del mes próximo, cuando los argentinos concurriremos a las urnas para las elecciones legislativas generales.
Con el antecedente de las PASO, con una importante victoria de la oposición, desde el oficialismo se alienta la posibilidad de reducir las diferencias y lograr aunque sea una victoria a lo Pirro. Desde la oposición se entiende que el oficialismo ha seguido cometiendo errores y eso se verá el domingo mencionado, incluso, dicen los optimistas, con mayores diferencias, que terminarían produciendo el fenómeno de un Congreso más equilibrado, en el que habrá que negociar los distintos temas.
Así las cosas hoy el oficialismo en el nuevo estadio Urbano, del Deportivo Morón, recordó a Néstor Kirchner al cumplirse once años de su fallecimiento. El orador principal y único fue el presidente Alberto Fernández, quien hizo un discurso de barricada, habló a la militancia y terminó diciendo que no se acordará con el Fondo Monetario Internacional poniéndose de rodillas. Un discurso que se escuchó en la Cámpora en los últimos y que también sorprendió porque el ministro de Economía, Guzmán, pareció olvidar su pasado universitario en los Estados Unidos para ponerse la camiseta de la resistencia.
En la oposición se le adjudica fundamental importancia al acto de este jueves en Ferro, donde la Unión Cívica Radical recordará el triunfo de Raúl Alfonsín aquel histórico 30 de octubre de 1983, cuando después de la terrible dictadura militar, la democracia comenzó a dar sus primeros pasos, que ya llevan felizmente casi cuatro décadas, más allá de las debilidades que pueda mostrar el sistema.
En forma coincidente la oposición mira de reojo la instancia judicial que tendrá un capítulo fundamental en la ciudad de Dolores, donde el juez Bava citó al ex presidente de la Nación, Mauricio Macri, por presunto espionaje a los familiares de las víctimas del ARA San Juan.
El dato de hoy es que la Cámara no aceptó la recusación del magistrado por los letrados de Macri, aunque pidió al juez que de ahora en más muestre mesura y compostura, como queriendo abrir el paraguas frente a lo que podría ser una medida drástica de Bava, como sería su detención. Macri tendrá en Dolores el apoyo de importantes referentes del espacio, que ponen en tela de juicio la acción del juez y lo ligan con un sesgo político.
El acto en Morón, con el presidente que habló a su militancia y el de mañana en Ferro con uno de los pilares de la oposición, la UCR, ponen sobre el tapete una vez más las dos caras de una misma Argentina, que ofrece distintos caminos de cara al futuro. En todo caso son dos miradas diferentes sobre la manera de encarar los distintos problemas que afectan al país en estos tiempos, como la desocupación, la inflación, la subida del dólar blue, la deserción escolar, etcétera, y por supuesto, la inseguridad, que hoy ofreció un capítulo preocupante en Rosario.
Hubo una marcha contra la inseguridad, convocada ante la muerte de un arquitecto en la ciudad santafesina y el gobernador Perotti y el intendente de Rosario, Jatkin, la pasaron mal al querer acercarse a la marcha. Tuvieron que salir como ratas por tirante ante la multitud que reaccionó violentamente ante la presencia de los funcionarios.
Y si se habla de inseguridad, no olvidar lo que pasa en el sur del país, con los presuntos mapuches y las actitudes violentas que padecen los lugareños, con una increíble indiferencia del gobierno nacional que pasa la pelota al gobierno provincial, desconociendo la letra de la ley de seguridad interior, que obliga al gobierno nacional a intervenir cuando se trata de bienes federales.
En este panorama, con discursos de uno y otro sector -en algunos casos vale trasladar la inquietud a los historiadores que en su momento se refieran a estos tiempos, porque hay discursos de funcionarios equis de hoy que nada tienen que ver o se dan de bruces con expresiones de los mismos en otros tiempos- la Argentina camina hacia el 14 N, dia D, en el que las urnas darán una respuesta ciudadana para saber en qué país quiere vivir la mayoría.
Aquí la expresión pasa por todos los que se acerquen a votar, de todos los sectores, desde los adolescentes a los jubilados, cada uno con sus inquietudes, sus esperanzas, sus reclamos, sus críticas. Habrá que ver qué dicen los jóvenes, muchos de ellos encandilados por el mensaje de personajes como Javier Milei y José Luis Espert, y lo mismo los representantes de la tercera edad, que pueden verse asombrados cuando comparan sus magras jubilaciones con aquella que en principio va a cobrar la mayor referente del oficialismo, que se llena la boca con los pobres y no se mira el propio ombligo.
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