Los Departamentos de Pastoral de Drogadependencia, de Pastoral Social y de Justicia y Paz, pertenecientes a la Vicaría de la Solidaridad de la diócesis de Quilmes emitieron un comunicado a raíz de los graves hechos de violencia ocurridos en el barrio San Rudecindo, en Florencio Varela, con tres muertos y dos heridos, así como la decisión de un frigorífico de dejar en la calle a 200 familias y el enfrentamiento de sectores de trabajadores del gremio de la carne.
Dice así: "Ante los hechos violentos producidos en la noche del 11 al 12 de agosto en Florencio Varela, donde tres personas fueron asesinadas a tiros y otras dos recibieron heridas durante un tiroteo entre dos bandas que presuntamente se enfrentaban por la venta de drogas en el barrio San Rudecindo, y un segundo tiroteo entre dos sectores de trabajadores del gremio de la carne en el barrio La Rotondad de Ingeniero Allan, donde un frigorífico despidió gente sin inedemnizar y cerró la planta, dejando a 200 familias sin trabajo, queremos acercar nuestra solidaridad primero con las víctimas y clamamos por la justicia y la paz para que estos hechos de violencia no golpeen las puertas de nuestros barrios populares y trabajadores que hace mucho están sufriendo con esta pandemia que nos atraviesa sin piedad.
Una vez más afirmamos que la justicia y la paz es un don, pero también una tarea en la cual estamos todos y todas involucrados".
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