LA "SUBLIME OBSESION" DE LOGRAR QUE TODOS ESTEN VACUNADOS


 La expresión de la ministra de Salud de la Nación, Carla Vizzotti, pidiendo "terminen con la obsesión de las vacunas", parece un despropósito en un país que por falta de vacunas y por un ritmo de aplicación demasiado lento ya está en la cornisa de los 80 mil fallecidos.

Podría respondérsele a la ministra que ojalá todos los funcionarios, sobre todo los responsables, tengan la obsesión de vacunar, ya sea el laboratorio Pfizer -en realidad ella habló solo de Pfizer en materia de obsesión y de vacunas-, del ruso, los ingleses, alemanes, norteamericanos, chinos o lo que sea, incluso los cubanos, en este último caso por supuesto con las aprobaciones cientificas correspondientes.

Por politizar la vacunación estamos sufriendo las consecuencias y ahora comienza a llover la tormenta de dosis, y la respuesta debe ser que cada día aumente en forma ostensible la cantidad que se aplique, para llegar, ojalá, al record de 500 mil en un solo día.

Desde el Congreso nacional -por fin- se espera aclarar muchos puntos oscuros relacionados con la vacunación y las vacunas. Todavía sigue la polémica por saber qué pasó con Pfizer para que después de hacer los experimentos con muchos argentinos, con la ilusión de recibir millones, termine por no llegar ninguna y quedar picando todo tipo de sospechas y/o suspicacia.

Ahora se dice que el martes en la comisión  de Salud han sido conminados los laboratorios para dar sus informes y responder a las inquietudes de los legisladores. Se los "invita" a concurrir, bajo apercibimiento, lo que podría considerarse como una intimación, pero, bueno, lo importante es que se sepa la verdad o se acerquen las respuestas que todos los argentinos esperan.

El diputado nacional Mario Negri, titular del bloque de Juntos por el Cambio, ha dicho que van a pedir una sesión especial para que se pueda dilucidar el tema de los laboratorios, fundamentalmente qué pasó con Pfizer para pasar del primero y principal convocado a terminar sin que llegue una sola dosis.

¿Qué pidió Pfizer para que el gobierno argentino lo desechara y resignara en aquel momento la promesa de 14 millones de vacunas? Si llegaban seguro que las cifras de muertos hubiera sido mucho menos de las dolorosas que hoy hay, y que ubican al país entre los que ocupan un primer lugar por los muertos por millón de habitantes.

En síntesis, como hoy dijo el jefe de gobierno de la Ciudad de Buenos Aires es buena la obsesión de la vacuna, un gran aliciente para que se pueda contar con la gran mayoría de la población vacunada.

DEFINICIONES

Conviene recurrir al diccionario para encontras las definiciones.

Obsesión: estado de la persona que tiene en la mente una idea, una palabra, o una imagen fija en forma permanente y se encuentra dominada por ella.

Sublime: algo extraordinariamente bello y que produce una gran emoción.

En síntesis, el tema de la vacuna como sublime obsesión sería algo así como alguien que tiene una idea -la vacuna- con la belleza y la emoción de lograr que todos concluyan con las dosis en su brazos.

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