Hoy han seguido las clases presenciales en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, porque el jefe de gobierno Horacio Rodríguez Larreta decidió no acatar el fallo del juez Furnari, que había decidido rechazar la medida de la Cámara en lo contencioso administrativo.
Desde el gobierno de la Ciudad entienden que aquí se necesita el fallo definitivo del más alto tribunal de la Nación, la Corte Suprema, y que mientras eso no ocurra no hay por qué modificar el criterio de que sigan las clases presenciales.
La Corte podría definirse el próximo viernes o a más tardar el lunes, y se desconoce todavía cuál será el criterio, aunque se sabe que hay posiciones encontradas entre sus cinco miembros. Aquí lo que se dilucida si se respeta la autonomía de CABA para decidir en materia de educación.
Como era de esperar, desde el gobierno nacional ardió Troya y llovieron las denuncias penales contra el jefe de gobierno de la Ciudad, amén de los tuiteros oficialistas que le dieron para que tenga a Larreta. El sindicalista Roberto Baradel dijo que lo que hizo Larreta es gravísima, un gremialista que desde siempre alentó las clases virtuales y que en el gobierno anterior se cansó de realizar paros en la provincia.
Mientras sigue la pelea entre clases presenciales y virtuales, por ahora en CABA -y en unas veinte provincias argentinas- la presencialidad sigue vigente. Solo la provincia de Buenos Aires en forma más marcada mantiene la decisión de apostar a la virtualidad, poniendo el acento en el crecimiento de casos y la saturación del sistema de salud.
En este sentido, hoy el gobernador Axel Kicillof se reunión con los representantes de las prepagas. Tras el encuentro el titular de la Asociación que reune a las prepagas, Claudio Belocopitt, subrayó el momento difícil que se vive en el sector por la escasez de camas Covid y pidió a todos aunar esfuerzos para que las cosas no estallen.
El gobernador Kicillof dijo que no quiere politizar la cuestión y apuntó a la necesidad de bajar los contagios. Si por él fuera, cerraría todo lo más pronto posible. "El virus no define a qué partido político perjudica y tenemos que trabajar en conjunto" reflexionó el gobernador.
Sin duda que es un mensaje positivo y valioso, lo importante es que convenza al jefe de gabinete de la provincia, el quilmeño Carlos Bianco y al ministro y vice de Salud bonaerense, Daniel Gollán y Nicolás Kreplat, que remen en el mismo sentido y que dejen de lado las expresiones lindantes con la irracionalidad o la agresión a los que piensan diferente.
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