Ya caída la pretemporada en Mar del Plata -se dijo porque el clima en La Feliz no aoompañaba- el Quilmes AC ya tiene concertado el primer amistoso. Será el sábado a las 9 en Remedios de Escalada ante Talleres, que milita en la Primera B Metropolitana.
En el Cervecero están sus flamantes incorporaciones: el arquero Saracho, los defensores Pier Barrios y García Basso y el delantero Bonetto. También el que regresó al club: el volante Culio.
Digamos que el arquero Alejandro Medina firmó su contrato con Arsenal de Sarandí por dos años.
Por su parte, Miguel Caneo, quien anunció que deja el fútbol, charló con el colega Germán Rodríguez y lamentó no estar en los planes del técnico Facundo Sava.
En forma irónica dijo que en una de esas en seis meses cambia de parecer, tanto él como el técnico, y puede coronar el sueño de retirarse en Quilmes, lo que hoy por hoy parece imposible.
Y ya que se habla del 10, uno que hoy está más vigente que nunca, Justo Giani, según anticipa el colega Germán Rodríguez va a concretar el pase a N.O.Boys de Rosario. Dice Germán que no se sabe si será ya el pase y jugará en el Rojinegro o si habrá un tiempo más en el Quilmes AC.
Se sabe que el Cervecero necesita dinero para afrontar sus cuestiones económicas, concurso de acreedores como primera prioridad, así que este dinero fresco vendrá para afrontar estas exigencias. ¿El monto?
En las redes alguien publicó que desde la órbita rosarina se habló de "tres palos" (¿en qué moneda porque 20 mil dólares parece poco?).
EL RECUERDO DE DI BLASI
El colega Sebastián Kerle, del diario El Sol y FM Q, destacó que desde la comisión directiva de Quilmes se decidió poner el nombre del relator Adrián Di Blasi a todo el sector de cabinas del estadio Centenario.
Una manera de recordar a quien relató la campaña del Cervecero durante más de treinta años y quien falleció recientemente por coronavirus.
Seguramente resonarán en esas cabinas aquel histórico "Por el amor de tu santa madre, terminalo Baldassi...". Sí fue el día del ascenso en Ferro ante Argentinos Juniors pero quedó marcado para siempre por el sentimiento de un relator que llevó al Cervecero en el corazón.
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