Quilmes perdió por penales su partido con Rafaela y quedó afuera de la lucha por el ascenso a primera división.
El volante Adrián Calello (foto) tuvo la mala fortuna de malograr los dos penales que le tocó rematar. De todas maneras tomó la situación con filosofía y así lo expresó en las redes. No se trata de convertirlo en villano o cargar las tintas sobre un futbolista que en los últimos partidos fue figura del Decano.
En las redes Adrián comenzó agradeciendo a los compañeros, y destacando sentirse realmente orgulloso e identificado "por la manera en la cual se jugó cada partido, dándolo todo, transpirando hasta la última gota, mirándonos a los ojos con la cabeza en alto, SIN PODER REPROCHARNOS ABSOLUTAMENTE NADA.
"Luego (quiero) hablar de la sociedad y la cual vivimos, donde hay mucho exitismo. Ser exitista es aplaudir lo que tiene éxiqto solo porque tiene éxito.
No me considero exitista. NO creo cuando me dicen Calello+10 ni tampoco cuando me dicen sos un burro, no podés jugar más al fútbol.
Soy una persona que cree en el TRABAJO, los proyectos a largo plazo, en el amor y dedicación a la profesión. Creo también en seguir SIEMPRE adelante, más allá de las piedras que pueda haber en el camino.
Porque la vida son momentos, y hay que saber convivir con la felicidad y con la tristeza.
Gracias también al cuerpo técnico, cuerpo médico, utileros, auxiliares y dirigentes del club por el gran esfuerzo y labor realizado estos meses.
Me queda agradecer al hincha, a la gente que creyó en nosotros y nos acompañó incondicionalmente en todo momento. Este proceso está comenzando y esperemos poner a Quilmes nuevamente en el lugar que se merece. Lo bueno está por venir".
Sabias palabras de alguien que tuvo la mala fortuna de malograr los dos penales, que finalmente significaron la eliminación del Cervecero. Pero ratifica la decisión de seguir luchando por el objetivo que se escapó como agua entre los dedos.
No hay que olvidar que Quilmes fue avanzando desde bien abajo y fue sumando ilusión, que anoche se terminó por la lotería de los penales. Lo importante, como dice Calello, es dejar todo, no hay reproche que hacer y como termina su perorata lo bueno está por venir. Para eso hay que tener convicciones y estar convencido de lo que se quiere.
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