El presidente de la Nación estuvo en Quilmes, en la Cervecería y Maltería, y en la oportunidad cerró la XXVI Conferencia Industrial, que organizó la Unión Industrial Argentina (UIA).
El propósito fue debatir los ejes de una agenda federal para la recuperación y el crecimiento.
Mientras se conocían los datos de la UCA (Universidad Católica Argentina), que habló de que en el país la pobreza alcanza el 44 por ciento, con 20 millones de argentinos que no tienen los elementos básicos para su alimentación, Alberto Fernández le habló a los empresarios y les dijo que de la pobreza se sale con empresarios que inviertan y den trabajo.
Agregó el primer mandatario que de la pobreza no se sale con el auxilio del Estado con los famosos planes, sino con empresarios que "inviertan y den trabajo".
Es bueno que Fernández se haya dado cuenta de esta realidad y que entienda que los planes eternos no sirven para reactivar la economía.
Claro está, los empresarios podrían responderle que están dispuestos a invertir y dar trabajo siempre y cuando desde el Estado les den condiciones de seguridad jurídica y garantía empresaria para no dudar a la hora de responder a la convocatoria.
Todo esto que se vivía en Quilmes contrastaba con la expresión del Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina con el informe de avance, deudas sociales en la Argentina en la última década. Crisis del empleo, pobrezas y desigualdades estructurales en el contexto del COVID 19, que dio las cifras que alarman, mueven y conmueven: aumentó la población en estado de pobreza del 40,8 al 44,2 por ciento.
Fernández sostuvo que cuando llegó la pandemia "el país estaba sin hospitales ni camas de terapia intensiva y el virus nos corría", y subrayó que se había logrado que no haya argentinos con hambre y que no haya habido algún argentino que no recibiera la atención sanitaria que requirió.
El presidente destacó que por primera vez en muchos años la recaudación supera a la inflación, comienza a moverse la construcción y también se mueve la industria.
"Argentina debe volver al mejor de los capitalismos, el que se preocupaba por invertir, arriesgar, producir, dar empleo y ganar, todo eso mejorando la distribución del ingreso!.
Habló el presidente de la UIA, Miguel Acevedo, quien dijo que había que acordar una política de Estado que cruce desarrollo territorial con desarrollo productivo. "Esta tarea no la resuelve un presidente o un ministro o un gobernador por si solos. Tampoco los empresarios, los sindicalistas o los medios de comunicación. La tarea exige acuerdos de largo plazo con una estrategia integral para salir de la coyuntura y orientar los esfuerzos al desarrollo productivo".
El ministro de Economía de la Nación, Martín Guzmán, sostuvo que había una recuperación más sólido en el nivel de actividad "pero con una dinámica heterogénea. En ese sentido afirmó que había un crecimiento real por tercer mes consecutivo de la recaudación fiscal, una dinámica positiva al reducirse la recha cambiaria y la elaboración de un programa plurianual basado en políticas de Estado.
Comentarios