No se trata de ser anticuarentena, tampoco "destilador del odio" ni mucho menos. Pero una parte importante de la población va a marcha a su manera en los próximos minutos en distintos lugares del país.
Epicentro en el Obelisco, más de un centenar de localidades en todo el país, significan que hay motivos para expresarse, como lo marca la Constitución, también los pensamientos y las medidas que pretenden coartar la libertad de expresión.
Hoy, a los condimentos de justicia en capilla, avances de los poderes para quebrar la división que establece la República, inseguridad, desempleo, etcétera, ahora se suma el NODIO, con un mensaje que parece un eufemismo porque ya solo escuchando la palabra parece que dijera "no odio" pero resulta que el objetivo es "la detección, verificación, identificación y desarticulación de las estrategias argumentativas de noticias maliciosas y la identificación de sus operaciones de difusión".
Toda una declaración que pone el periodismo nuevamente en jaque, y cuando se advierte quiénes integran ese llamado Observatorio de la desinformación y la violencia simbóica en medios y plataformas digitales, por lo menos hay que tener un poco de miedo.
Se trata de la titular de la Defensoría del Público, la periodista Miriam Lewin; el director de Planificación Estratégica e Investigación, Glenn Postolksi; el psicoanalista, Jorge Alemán; la diputada Florencia Saintout; el profesor Damián Loreti y la periodista María Seoane.
También se habló de la investigadora Adriana Amado Suárez, aunque ella sostuvo que fue invitada para participar pero no aceptó.
Los citados están muy ligados a un determinado y sesgado color político, lo que hace más preocupante la formación de esta organismo, dentro de la Defensoría del Público.
LOS RECHAZOS
Muchos han sido los repudios que generó este anuncio. Por ejemplo ADEPA, es decir la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas, que sostuvo que NODIO supuestamente "tendrá como objetivo proteger a la ciudadanía de las noticias falsas, maliciosas y falacias.
Y agrega que "la instauración de este tipo de órganos de vigilancia desde el Estado conlleva un cierto riesgo que estos sean utilizados como método sutil de disciplinamiento o represalia por motivaciones ajenas a los principios que dicen promover.
Incluso dice ADEPA que el panel de presentación del organismo muestra en su casi totalidad de integrantes a aquellos "identificados con un sector político claramente determinado, lo que es un indicio de ello.
Aclara ADEPA que "la mejor manera de combatir la desinformación y los discursos de odio es fortalecer el periodismo profesional y los contenidos de calidad, muchas veces no jerarquizados adecuadamente por redes sociales y plataformas digitales. Nadie está exento de cometer errores pero medios y periodistas son responsables ante sus audiencias y judicialmente ante cualquier desvío o daño.
Y remate la entidad: "Que un organismo público monitoree el ejercicio de la opinión y la información en una sociedad siempre es un llamado de atención para la libertad de expresión".
GEORGE ORWELL
Este NODIO parece hacer recordar al escritor y periodista británico George Orwell (su verdadero nombre era Eric Arthur Blair), autor de dos obras emblemáticas: Rebelión en la granja y 1984.
1984 la escribió en 1949 un año antes de su muerte por tuberculosis. El libre fue el precursor del concepto del Gran Hermano y la creación del Ministerio de la Verdad. Una sociedad en la que todo el mundo depende de una gran maquinaria que maneja los hilos y donde nadie es dueño de sus actos.
El NODIO hace recordar que hay una intención de manejar la prensa desde un ser superior, cuando la República y el sistema democrático tiene a la libertad de expresión como uno de los pilares fundamentales.
Este pensamiento hace suponer que es otro acicate para justificar a quienes hoy salen a reclamar. Sí, hay rebelión en la granja, lo importante es que los responsables escuchen a los que se manifiestan y tengan en cuenta que gobiernan para los 45 millones de argentinos y no solo para un sector.
Sí, ese sector se va a manifestar el próximo sábado, con un gran sesgo partidario, recordando los 75 años del día de la lealtad. Una jornada histórica que tuvo entre sus grandes gestores a un sindicalista, del gremio de la carne y de la ciudad de Berisso, Cipriano Reyes, que volcó en un libro emblemático esa jornada: Yo hice el 17 de octubre, y ahí cuenta cómo se gestó la manifestación para lograr la libertad de Juan Domingo Perón que estaba preso en la isla de Martín de García. Y, dice, Cipriano, la mayoría de los gremios no marchó, sobre todo los más poderosos.
Ojalá que NODIO suene a no-odio y no termine siendo un eufemismo. Recordemos que el diccionario de la Real Academia Española define eufemismo como "palabra o expresión más suave o decorosa con que se sustituye otra considerada tabú, de mal gusto, grosera o demasiado franca".
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