Quizás el caso Ameri, el diputado que perdió su banca por un movimiento erótico con su pareja en este mundo virtual de la nueva normalidad -dijo que no se había dado cuenta, creía que la pantalla no estaba abierta o en todo caso estaba en otra, porque en realidad no sabía lo que se estaba tratando- se suma ahora a la lista interminable de episodios que han ocurrido en el Congreso en toda su historia.
Ameri nació en Buenos Aires y se fue a vivir a Salta allá por el 2010. Anteriormente fue integrante de la barra de River, incluso un periodista que sigue al Millonario lo recuerda como mozo de la confitería del club de Nuñez, también barra. Comentó además que en ocasión de un Superclásico, con incidentes con la barra, perdió un ojo en un enfrentamiento.
En Salta llegó al Congreso a raíz de un enroque, donde el conocido Oso Leavy fue como senador y él, que era suplente, pasó a ser diputado. Ahora que renunció, su lugar lo ocupará una legisladora de Orán, antropológa. Alcira Figueroa.
Hay mucha bibliografía que cuenta historias del Congreso, desde los libros de Ramón, titular de la Editorial Columba, a la sazón director de taquígrafos del Senado -cuenta historias del Senado de las primeras décadas del siglo XX con El Congreso que yo he visto, acompañando con ilustraciones de su propia autoría, ya que era un eximio caricaturista- hasta la obra del periodista quilmeño Armando Vidal, El Congreso en la trampa, que cuenta el episodio del "diputrucho", cuando un asesor del diputado nacional Saadi se sentó en la banca a la hora de aprobar el quórum para una ley, y que fue descubierto por la sagacidad periodística. El apuntado, Abraham Kenan, se excusó diciendo que se había sentido mal y por eso se sentó, pero el escándalo quedó para la historia.
También está el caso del diputado nacional Angel Luque, que terminó siendo expulsado por haber declarado que tenía poder para hacer desaparecer un cadáver. Fue cuando su hijo, Guillermo, fue acusado de haber participado del crimen en Catamarca de María Soledad Morales.
No se dejó entrar a la Cámara por delitos de lesa humanidad al diputado nacional electo Luis Patti y la diputada nacional Norma Kennedy fue suspendida por el Cuerpo.
En el Senado de la Nación fue asesinado el senador Enzo Bodabehere, por alguien que en realidad quería matar a Lisandro de la Torre y así lo registra el diario de Sesiones del 23 de julio de 1935.
El periodista Gabriel Sued es autor del libro Los secretos del Congreso y en uno de sus capítulos, titulado La vida secreta del Palacio, cuenta que el actual director general de taquígrafos del Senado, Jorge Bravo -también integrante del cuerpo de taquígrafos del Concejo Deliberante de Quilmes- atesora en su despacho del primer piso del Palacio dicho diario de sesiones, el día en que fue asesinado en pleno recinto Enzo Bordabehere, senador electo por Santa Fe.
"Ocurrió cuando Lisandro de la Torre, senador por la misma provincia y jefe de bancada demócrata progresista, interpelaba al ministro de Hacienda, Federico Pinedo (abuelo del senador del Pro), por irregularidades en el comercio de carnes con Inglaterra.
La discusión subió de tono, cuenta Sued, y transcribe el contenido de la versión taquigráfica de esa trágica jornada.
Sr. ministro de Hacienda. -!El señor senador por Santa Fe llega, en este momento, a la nota más alta de su histriónica comiquería!
-El senador De la Torre abandona su banca y se acerca a la del ministro de Hacienda.
Sr. ministro de Hacienda. !Insolencia y cobardía me atribuye! El señor senador por Santa Fe es capaz, señor presidente, de retarme a duelo, porque sabe que, por mis convicciones, yo no me bato.
Sr de la Torre (de pie).- !Y usted es capaz de no batirse por cobardía!
-Se produce una incidencia personal entre el ministro de Agricultura (Luis Duhau) y el senador por Santa Fe.
-Suena la campana de orden; penetra al recinto gente extraña y se oyen disparos de armas de fuego al lado de las bancas de los ministros, produciéndose un gran tumulto.
Sr. presidente (Carlos Bruchmann).- Queda interrumpida la sesión.
- Es la hora 16 y 30 minutos.
Explica aquí Gabriel Sued que "la gente extraña" que irrumpió en el recinto eran matones del partido conservador, del presidente de facto Agustín P. Justo. Ramón Valdez Cora, ex comisario bonaerense y custodio del ministro de Agricultura, sacó un revólver y disparó cuatro veces. Bordabehere, que había intercedido para defender a De la Torre, tendido en el piso tras un empujón de Duhau, recibió dos balazos en la espalda y uno en el pecho. Intentaron reanimarlo en una sala contigua al reciento hasta que llegó una ambulancia que lo trasladó al Hospital Ramos Mejía, donde murió minutos después.
El asesino aprovechó la conmoción, salió corriendo, cruzó un pasillo y se metió en la sala de taquígrafos, a metros del recinto.Lo detuvieron cuando intentaba llegar hasta los ventanales que dan hacia la calle Combate de los Pozos.
Precisamente el mencionado más arriba, Ramón Columba, que era el director del Cuerpo firmó la versión taquigráfica.
El incidente en el Senado derivó que en 1984 se lleve al cine, con el filme Asesinato en el Senado de la Nación, bajo la dirección de Juan José Jusid y las interpretaciones de Pepe Soriano, como el senador De la Torre, Arturo Bonín como Enzo Bordabehere, Alberto Segado como Luis Duhau, Oscar Martínez como Federico Pinedo y Miguel Angel Solá como Ramón Valdez Cora.
EL VOTO NO POSITIVO...
Otro hecho impactante en la vida del Congreso fue aquella histórica sesión del Senado, que culminó con el desempate en la votación del presidente del Cuerpo, Julio Cobos, con su voto no positivo en el caso de las retenciones del campo.
Sued habla de los taquígrafos, cuenta la manera en que realizan su oficio de tomar la palabra de los legisladores con los signos taquígrafos -ya sea a través del lápiz o la birome o bien con la máquina de estenotipia- y vuelve a citar al quilmeño Jorge Bravo, quien desempeña su tarea desde 1980. "Cuando tomás nota, no sos una persona, sos un ente. No tenés tiempo parea pensar. Las palabras van directo del oído a las manos, sin pasar por el cerebro. No sabés ni lo que están diciendo. Estás en trance".
Bravo le alcanzó al autor la versión taquigráfica de la sesión del 17 de julio de 2008 con el voto de Cobos.
Sr. Presidente (Cobos).- Yo creo que la presidenta de los argentinos me va a entender porque no creo que sirva una ley que no es la solución de este conflicto. La historia me juzgará, no sé cómo, pero espero que esto se entienda.
Soy un hombre de familia, como todos ustedes, con una responsabilidad en este caso. No puedo acompañar y esto no significa que esté traicionando a nadie. Estoy actuando conforme a mis convicciones.
Así que yo le pido a la presidenta de los argentinos que tiene la oportunidad de enviar un nuevo proyecto que contemple todo lo que se ha dicho; todos los aportes que se han brindado,d e gente de afuera y de aquí mismo. !Que la historia me juzgue! Pido perdón si me equivoco. Voto... Mi voto no es positivo. Mi voto es en contra (Aplausos).
Sr. Secretario (Estrada).- En consecuencia, el proyecto queda rechazado en los términos del artículo 81 de la Constitución Nacional por el voto del señor vicepresidente. Se harán las comunicaciones correspondientes.
-Son las 4 y 21 del jueves 17 de julio de 2008.
LOS TAQUIGRAFOS
En esta misma página en la que habla de los taquígrafos, el periodista Gabriel Sued también entrevista al jefe de taquígrafos de Diputados, Guillermo Castellano, quien está en el Congreso desde el 11 de setiembre de 1973.
"Tomamos las frases literales, tal cual fueron dichas, no las arreglamos, no les completamos el significado. Si una idea queda inconclusa, ponemos puntos suspensivos. En la otra Cámara quizás lo hubiesen cambiado", dice y expone una rivalidad de vieja data.
"Solo corregimos errores involuntarios para que la frase tenga el sentido que le quiso dar el diputado" explica Castellano, restando valor a la crítica.
Agrega Sued un episodio que hace a los taquígrafos: una sola vez se negaron a ingresar al recinto. Fue en mayo de 2000, en solidaridad con los trabajadoes de la imprenta, cuyo cierre había sido anunciado semanas antes por el gobierno de De la Rúa. Después de un par de horas de incertidumbre, en la que los diputados discutieron si la sesión tenía validez sin la presencia de los taquígrafos, la resistencia cedió e ingresó un equipo de emergencia parea tomar nota del debate. "Mas que tomar nota de lo que se habla, lo que hacemos es dar fe" dice Castellano, con orgullo y un dejo de nostalgia.
Cuenta Sued que veinte años después del asesinato de Bordabehere, la sala en la que fue atendido se convirtió en un consultorio.
INFORMACION PERIODISTICA
Vale agregar que el periodista Sued será el director periodístico del nuevo canal de televisión -IP, Información Periodística- que presentará el mes próximo el grupo Octubre, que comanda el sindicalista Víctor Santamaría, del gremio de los encargados de edificios.
El nuevo canal estará en funcionamiento desde el 17 de octubre, cuando se cumplen 69 años de la primera transmisión de televisión en el país (el viejo Canal 7), en esa oportunidad se emitió un acto con Eva Perón.
Desde el canal IP el propietario sostiene que se tomará la información con rigor periodístico, sin militancia (en relación a otros medios del grupo, como Página 12 y AM 750; también Diario Z, la revista Caras y Caretas, El Planeta Urbano, PIN, Radio Oktubre 89.1, la 94.7, club Octubre y desde mayo tiene a cargo la programación de Radio del Plata).
Para este emprendimiento, que funcionará en los estudios de Canal 9, -el grupo Octubre es socio de Telearte, que administra el 9- se han invertido 2,5 millones de dólares en equipamiento tecnológico y otros 450 mil dólares para remodelar los estudios.
Se contará con un equipo de 242 periodistas, técnicos y productores.
Pese a anunciar que será información sin editorializar, es evidente que se trata de un nuevo medio cercano al oficialismo (no olvidar que integra el grupo Callao que desde un principio formó Alberto Fernández).
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