Parece increíble, pero la realidad en este caso supera a la ficción. Dos bomberos fallecieron ayer en Villa Crespo cuando estaban atendiendo un siniestro ocurrido en una perfumería del barrio porteño.
En plena acción, junto al SAME que dirige el doctor Crescenti, hubo una explosión terrible que acabó con la vida de estos servidores públicos y lesionó a otros, entre ellos el quilmeño Walter Cáseres.
Uno de los bomberos fallecidos, Maximiliano Firma Paz, vivía en Berazategui.
Curiosas vueltas del destino pero la trágica jornada de la víspera coincidió con el día nacional del bombero, que recordó la creación del primer cuartel de estos servidores en el barrio de la Boca.
Los bomberos volvieron a demostrar ayer su vocación de servicio y el dolor que provoca este triste resultado del siniestro de ayer reitera lo que significan estos héroes, que en este caso pagaron el alto precio de su vida por salvar a los demás.
El propio doctor Crescenti salvó milagrosamente su vida, y ratificó que su vida también corrió peligro por la magnitud de la explosión.
En plena acción, junto al SAME que dirige el doctor Crescenti, hubo una explosión terrible que acabó con la vida de estos servidores públicos y lesionó a otros, entre ellos el quilmeño Walter Cáseres.
Uno de los bomberos fallecidos, Maximiliano Firma Paz, vivía en Berazategui.
Curiosas vueltas del destino pero la trágica jornada de la víspera coincidió con el día nacional del bombero, que recordó la creación del primer cuartel de estos servidores en el barrio de la Boca.
Los bomberos volvieron a demostrar ayer su vocación de servicio y el dolor que provoca este triste resultado del siniestro de ayer reitera lo que significan estos héroes, que en este caso pagaron el alto precio de su vida por salvar a los demás.
El propio doctor Crescenti salvó milagrosamente su vida, y ratificó que su vida también corrió peligro por la magnitud de la explosión.
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