LA TUNELERA ELISA, AHORA SE LLAMA EVA

Llamó la atención por cierto saber que esa tunelera que presentó el gobierno de Alberto Fernández hace unos días en Bernal se llamara Elisa y que ahora fue "bautizada" como Eva (por Evita).
Más allá de que había sido inaugurada en 2017 por el presidente Mauricio Macri y la gobernadora María Eugenia Vidal, lo importante es sabe si está bien o no el cambio de nombre.
Alguien con ironía supuso que la llamaron Elisa (por Lilita Carrió). Ironías aparte, la realidad que es la única verdad -frase que repetía el general Perón - el periodismo se puso a bucear en el nombre Elisa.
Y se llegó entonces a la ingeniera Elisa Beatriz Bachofen, quien fue la primera ingeniera que se graduó en la Argentina. Se recibió en 1918.
Y como señala la periodista Crolina Hadad, en La Nación, no solo fue la primera ingeniera de nuestro país sino también en Latinoamérica.
No fue la única mujer que conmovió al mundo científico por su egreso en esos tiempos. Cecilia Grierson fue la primera médica -sí la misma que había sido postulada para el billete de 5000 pesos junto al sanitarista Ramón Carrillo, ahora criticado por presunta adhesión al régimen de Adolf Hitler- y también entre las primeras médicas argentinas puede citarse a Julieta Lanteri, figura recordada por la periodista quilmeña Ana María de Mena, con su excelente libro Paloma Blanca, donde retrata la figura de Julieta, que fue la primera mujer que votó en la Argentina en 1911(cuatro décadas antes de que con la gestión de Evita la mujer fuera autorizada al voto).
Tanto Julieta Lanteri como Cecilia Grierson o la propia Elisa Bachofen nacieron antes que Eva Perón, Elisa se recibió de ingeniera un año antes de que llegara al mundo Evita aquel 7 de mayo de 1919.
Todas ellas fueron criticadas por recibirse en profesiones que en esos tiempos estaban reservadas a los hombres.
Julieta Lanteri debió luchar contra esa sociedad marxista y su lucha por los derechos cívicos de la mujer, muchísimo antes que Eva Perón, le valieron inconvenientes y rechazos. Incluso su acción política molestaba y la propia autora de Paloma Blanca, Ana María de Mena, pone en duda el fin de la existencia de la doctora Lanteri, cuando fue atropellada por un automóvil en pleno centro de Buenos Aires, con todas las sospechas de que pudo ser un atentado.
La periodista Carolina Hadad relata expresiones de Elisa Bachofen, quien decía que "cuando la mujer se inició en la profesión de ingeniera, no faltaron críticas, oponiendo como principal i,mpedimento o inconveniente, la de los trabajos de campaña, pero, como ya he dicho, ello ha sido la resultante de una falta de concepto de la verdadera misión del ingeniero y de su campo de acción, sin tener en cuenta la importancia del trabajo de gabinete, puesto que parea poder calcular cualquier obra de ingeniería, se necesitan poseer los conocimientos científicos, que dan los estudios universitarios y en cambio, los ejecutores de las obras proyectadas por el ingeniero, no siempre son técnicos de esa categoría".
Elisa trabajó en la Dirección de Puentes y Caminos y fue presidenta de la Comisión Técnica del Círculo de Inventores, fundado en 1922, presentó varias patentes de máquinas agrícolas y hasta publicó una guía de inventor.
También militó en la Unión Feminista Nacional, y lo hizo junto a la citada doctora Julieta Lanteri y también a otra prestigiosa profesional como la doctora Alicia Moreau de Justo.
La tunelera de Bernal se llamaba Elisa por la citada primera ingeniera en Latinoamérica, ahora le pusieron Eva, por la "abanderada de los humildes".
Cuando hay tantos recuerdos de Evita en tantos lugares del país que parece un despropósito haberle cambiado el nombre para hacer olvidar a Elisa. Esto es, como alguien dijo, como si Macri como presidente hubiera decidido cambiarle el nombre a la Centro Cultural Kirchner (por Néstor). Y no lo hizo...

Comentarios