La doctora Julia Márquez, del juzgado de ejecución Nro. 1 del Departamento Judicial de Quilmes, charló con el periodista Gerardo Young en el programa Por la vuelta, en La Nación + y se refirió a la queja que había presentado a raíz de la salida de presos en grandes cantidades de las cárceles bonaerenses, a raíz del aislamiento social, preventivo y obligatorio, en el marco de la pandemia del coronavirus. Expresiones que sacudieron el avispero en tiempos en que se conoció que 2286 presos ya fueron liberados y siguen con el arresto domiciliario con tobillera electrónica.
"Lo que llama la atención es que nadie tenga en cuenta el procedimiento penal. Nosotros, los jueces, aplicamos al ley, no la creamos con lo que cualquier modificación del modo de proceder debe provenir de la Legislatura.
No la podemos hacer nosotros. No hay atribución de nosotros.
Ahora, a partir de esta situación como la que se está dando debería haber una ley que autorice.
No me considero ni más ni menos que un empleado o un repositor de supermercado. El repositor va a trabajar.
Cuando se le preguntó qué pasaba con los pedidos de los presos para acogerse a los beneficios de la prisión domiciliaria por el coronavirus, la magistrada sostuvo que "son infinitos, y en algunos casos por cada uno hay cuatro presentaciones, porque lo hace el interno, la familia, la cámara de la tortura, etcétera.
Vivimos una situación crítica. Y este fallo (de Casación) no ha contribuido. La verdad es que nos corresponde conservar la calma y ser apegados a la ley, porque lo único que hay que observar es el respeto a la ley. No podemos improvisar.
Se trata de una situación especial porque estamos atravesando un momento inédito en el país y en el mundo.
PODER JUDICIAL
La magistrada dijo que "el Poder Judicial es una estructura jerárquica. Es difícil manifestarse en contra de lo que sostiene un superior y sobre todo cuando hay una influencia política porque esta es la realidad.
Aclaró la doctora que no es la única que se ha manifestado preocupada por la situación de las cárceles y las liberaciones. "Hay muchos que se comunicaron conmigo y esto empezó a circular. Sabía que al decir esto me exponía y que iba a recibir críticas porque lo que decía no iba a caer bien. Seguramente es hora de aplicar la ley".
Y subrayó que "las últimas estadísticas de 2018 dicen que por lo menos hubo 200 mil investigaciones penales que comenzaron. A menos que creamos que la gente está local y sale a denunciar cualquier cosa, es un número importante".
En cuanto a este tipo de situaciones como la liberación de presos, tras el motín de Devoto, explicó que "lo único que hace es alimentar las conductas transgresoras, lo que es enormemente perjudicial. Es una locura que una persona que ingresa a la cárcel por un hecho de violencia egrese por otro hecho de violencia como un motínt".
EN SAN MIGUEL
Vale agregar que ante lo que genera la liberación de presos de las cárceles por el coronavirus, apareció el intendente de San Miguel, Jesús Méndez, quien se quejó de esta medida, agregando que en el caso de su distrito hay unos veinte presos que han vuelto.
"La gente tiene miedo. Robo agravado, abuso sexual, estafa, extorsión, privación ilegítima de la libertad, venta de drogas son solo algunas de las causas por las que estaban detenidos estos veinte presos. Estoy de acuerdo con que los detenidos en las cárceles estén en buenas condiciones y que sean protegidos por el coronavirus. Pero los presos vuelven a sus casas y barrios, los mandan para que mejoren pero seguramente no es la solución.
"Lo que llama la atención es que nadie tenga en cuenta el procedimiento penal. Nosotros, los jueces, aplicamos al ley, no la creamos con lo que cualquier modificación del modo de proceder debe provenir de la Legislatura.
No la podemos hacer nosotros. No hay atribución de nosotros.
Ahora, a partir de esta situación como la que se está dando debería haber una ley que autorice.
No me considero ni más ni menos que un empleado o un repositor de supermercado. El repositor va a trabajar.
Cuando se le preguntó qué pasaba con los pedidos de los presos para acogerse a los beneficios de la prisión domiciliaria por el coronavirus, la magistrada sostuvo que "son infinitos, y en algunos casos por cada uno hay cuatro presentaciones, porque lo hace el interno, la familia, la cámara de la tortura, etcétera.
Vivimos una situación crítica. Y este fallo (de Casación) no ha contribuido. La verdad es que nos corresponde conservar la calma y ser apegados a la ley, porque lo único que hay que observar es el respeto a la ley. No podemos improvisar.
Se trata de una situación especial porque estamos atravesando un momento inédito en el país y en el mundo.
PODER JUDICIAL
La magistrada dijo que "el Poder Judicial es una estructura jerárquica. Es difícil manifestarse en contra de lo que sostiene un superior y sobre todo cuando hay una influencia política porque esta es la realidad.
Aclaró la doctora que no es la única que se ha manifestado preocupada por la situación de las cárceles y las liberaciones. "Hay muchos que se comunicaron conmigo y esto empezó a circular. Sabía que al decir esto me exponía y que iba a recibir críticas porque lo que decía no iba a caer bien. Seguramente es hora de aplicar la ley".
Y subrayó que "las últimas estadísticas de 2018 dicen que por lo menos hubo 200 mil investigaciones penales que comenzaron. A menos que creamos que la gente está local y sale a denunciar cualquier cosa, es un número importante".
En cuanto a este tipo de situaciones como la liberación de presos, tras el motín de Devoto, explicó que "lo único que hace es alimentar las conductas transgresoras, lo que es enormemente perjudicial. Es una locura que una persona que ingresa a la cárcel por un hecho de violencia egrese por otro hecho de violencia como un motínt".
EN SAN MIGUEL
Vale agregar que ante lo que genera la liberación de presos de las cárceles por el coronavirus, apareció el intendente de San Miguel, Jesús Méndez, quien se quejó de esta medida, agregando que en el caso de su distrito hay unos veinte presos que han vuelto.
"La gente tiene miedo. Robo agravado, abuso sexual, estafa, extorsión, privación ilegítima de la libertad, venta de drogas son solo algunas de las causas por las que estaban detenidos estos veinte presos. Estoy de acuerdo con que los detenidos en las cárceles estén en buenas condiciones y que sean protegidos por el coronavirus. Pero los presos vuelven a sus casas y barrios, los mandan para que mejoren pero seguramente no es la solución.
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