Se cumplieron ayer nada menos que 36 años de aquel histórico partido en la bombonera, por el torneo de primera división del fútbol argentino, donde Boca le ganó a Quilmes 1 a 0 con gol de Hugo Alves.
El partido quedó como una anécdota, aunque fue un escalón más en el descenso que finalmente tuvo el Cervecero (debió jugar un desempate con Unión, en Sarmiento de Junín y perdió 1 a 0).
La historia recuerda que tras ese encuentro, en las cercanías del estadio, hubo un enfrentamiento entre barras de Boca y de Quilmes, con el trágico saldo de la muerte de un hincha boquense.
Por ese episodio fue acusado el jefe de la barra de Quilmes, el Negro Thompson (su verdadero nombre era Carlos Alberto De Godoy).
Se inició un largo periplo judicial, con la circunstancia de que el acusado negaba su participación y aseguraba no que había concurrido esa noche porque sufría de lumbalgia.
Desde el diario El Sol de Quilmes se inició una campaña, recogiendo testimonios de quienes aseguraban que el Negro no había ido a la bombonera.
Así las cosas en primera instancia no fue condenado, pero debió comerse varios meses en prisión a la espera del fallo. Cuando fue liberado, pasó por el diario El Sol, y con lágrimas en los ojos aseguraba que no le deseaba ni al peor enemigo lo que había sufrido en la cárcel.
Hubo apelación del fallo y en segunda instancia fue condenado a 9 años de prisión.
Ante esa situación y sabedor de lo que se venía, el Negro se escapó al Paraguay, donde estuvo varios años y un buen día regresó a Quilmes y en pleno centro instaló una verdulería, con el nombre sugestivo: Los Cerveceros.
Esto determinó que alguien lo denunciara por lo que fue detenido y enviado a la cárcel de Devoto, donde años después falleció, supuestamente de una afección cardíaca jugando al fútbol, aunque otras versiones hablaron de un enfrentamiento.
AQUEL PARTIDO
Para los memoriosos, y apelando al Decano, el encuentro Boca-Quilmes, jugado en la noche del 5 de enero de 1983, fue arbitrado por Juan Carlos Demaro y se recaudaron 364.510.000 pesos.
Fue por la fecha 33 del torneo de primera.
BOCA JUNIORS: Gatti; Passucci, Baachino, Mouzo y Hugo Alves; Krasouski, Berta, Abel Alves y Vázquez (Stafuza); Tamer (Giachello) y Sotelo.
QUILMES: Tocalli; Pedernera, Pizzarulli, Clide Díaz (Acevedo) y Ricardo Alonso; Oscar A. Gissi, Gáspari, Labruna (Filardo); Lorea, Martínez y Oscar E. Gizzi.
Gol: PT 43´ Hugo Alves.
El partido quedó como una anécdota, aunque fue un escalón más en el descenso que finalmente tuvo el Cervecero (debió jugar un desempate con Unión, en Sarmiento de Junín y perdió 1 a 0).
La historia recuerda que tras ese encuentro, en las cercanías del estadio, hubo un enfrentamiento entre barras de Boca y de Quilmes, con el trágico saldo de la muerte de un hincha boquense.
Por ese episodio fue acusado el jefe de la barra de Quilmes, el Negro Thompson (su verdadero nombre era Carlos Alberto De Godoy).
Se inició un largo periplo judicial, con la circunstancia de que el acusado negaba su participación y aseguraba no que había concurrido esa noche porque sufría de lumbalgia.
Desde el diario El Sol de Quilmes se inició una campaña, recogiendo testimonios de quienes aseguraban que el Negro no había ido a la bombonera.
Así las cosas en primera instancia no fue condenado, pero debió comerse varios meses en prisión a la espera del fallo. Cuando fue liberado, pasó por el diario El Sol, y con lágrimas en los ojos aseguraba que no le deseaba ni al peor enemigo lo que había sufrido en la cárcel.
Hubo apelación del fallo y en segunda instancia fue condenado a 9 años de prisión.
Ante esa situación y sabedor de lo que se venía, el Negro se escapó al Paraguay, donde estuvo varios años y un buen día regresó a Quilmes y en pleno centro instaló una verdulería, con el nombre sugestivo: Los Cerveceros.
Esto determinó que alguien lo denunciara por lo que fue detenido y enviado a la cárcel de Devoto, donde años después falleció, supuestamente de una afección cardíaca jugando al fútbol, aunque otras versiones hablaron de un enfrentamiento.
AQUEL PARTIDO
Para los memoriosos, y apelando al Decano, el encuentro Boca-Quilmes, jugado en la noche del 5 de enero de 1983, fue arbitrado por Juan Carlos Demaro y se recaudaron 364.510.000 pesos.
Fue por la fecha 33 del torneo de primera.
BOCA JUNIORS: Gatti; Passucci, Baachino, Mouzo y Hugo Alves; Krasouski, Berta, Abel Alves y Vázquez (Stafuza); Tamer (Giachello) y Sotelo.
QUILMES: Tocalli; Pedernera, Pizzarulli, Clide Díaz (Acevedo) y Ricardo Alonso; Oscar A. Gissi, Gáspari, Labruna (Filardo); Lorea, Martínez y Oscar E. Gizzi.
Gol: PT 43´ Hugo Alves.
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