Boca-River, mañana a las 17 en la bombonera (la revancha será el 24 de noviembre a la misma hora en el Monumental).
Se trata de dos finales por la Copa Libertadores de América, y se paraliza el país, y por qué no el mundo futbolero.
Mañana será ante una multitud de hinchas de Boca, que sin duda irán para festejar una victoria que los ponga a un paso del título final.
Claro enfrente estará el River de Marcelo Gallardo, aunque sin Gallardo en el banco por la sanción de la Conmebol.
Un árbitro chileno será el primer encargado de esta primera batalla.
Se viene hablando de estas finales desde hace tiempo, incluso hay medios que cuentan las horas que faltan para mañana a las 17, y después de las 19, cuando se sepa el primer resultado, comenzará la cuenta regresiva hasta la revancha.
Serán 14 días de dimes y diretes.
Recordemos que en el medio la selección argentina jugará dos encuentros amistosos, fechas FIFA, con México, y seguramente el interés que despertarán estos partidos estarán a años luz del Superclásico.
Alguna vez se hizo una encuesta mundial y se llegó a la conclusión que uno de los espectáculos anhelados por todo el mundo, y no dejar de verlos a lo largo de la existencia, es un Superclásico en la bombonera, con aquello de que el estadio "late".
Mañana, entonces, Argentina paraliza el interés y lo centra en el choque de los primos hermanos nacidos en la ribera y que a lo largo de la historia futbolera se convirtieron en los rivales preferidos por el espectador, sea hincha o no de alguno de los dos.
Los demás, al menos por esas dos horas históricas, abstenerse.
Hasta la Superliga queda relegada, porque mañana solo habrá un partido (¿se le dará bolilla?) entre Colón y Estudiantes de La Plata.
Ah! El domingo juega el líder de la Superliga, Rácing, que visita a Gimnasia en el bosque platense. ¿Se podrá hablar de este encuentro ese día, que será el día después del primer Superclásico del fútbol argentino por la finalísima de la Copa Libertadores?
Mañana habrá periodistas de todo el mundo, público llegado de distintas partes para vivir una jornada irrepetible, etcétera...¿Será para tanto?¿El gobierno se verá beneficiado por estos dos Superclásicos en dos semanas? El tiempo lo dirá...
No olvidar que mañana en la Argentina es el día de la tradición. ¿Por el Superclásico? No, por el recuerdo de José Hernández, autor del mítico Martín Fierro, el mayor libro gauchesco nacional.
Se trata de dos finales por la Copa Libertadores de América, y se paraliza el país, y por qué no el mundo futbolero.
Mañana será ante una multitud de hinchas de Boca, que sin duda irán para festejar una victoria que los ponga a un paso del título final.
Claro enfrente estará el River de Marcelo Gallardo, aunque sin Gallardo en el banco por la sanción de la Conmebol.
Un árbitro chileno será el primer encargado de esta primera batalla.
Se viene hablando de estas finales desde hace tiempo, incluso hay medios que cuentan las horas que faltan para mañana a las 17, y después de las 19, cuando se sepa el primer resultado, comenzará la cuenta regresiva hasta la revancha.
Serán 14 días de dimes y diretes.
Recordemos que en el medio la selección argentina jugará dos encuentros amistosos, fechas FIFA, con México, y seguramente el interés que despertarán estos partidos estarán a años luz del Superclásico.
Alguna vez se hizo una encuesta mundial y se llegó a la conclusión que uno de los espectáculos anhelados por todo el mundo, y no dejar de verlos a lo largo de la existencia, es un Superclásico en la bombonera, con aquello de que el estadio "late".
Mañana, entonces, Argentina paraliza el interés y lo centra en el choque de los primos hermanos nacidos en la ribera y que a lo largo de la historia futbolera se convirtieron en los rivales preferidos por el espectador, sea hincha o no de alguno de los dos.
Los demás, al menos por esas dos horas históricas, abstenerse.
Hasta la Superliga queda relegada, porque mañana solo habrá un partido (¿se le dará bolilla?) entre Colón y Estudiantes de La Plata.
Ah! El domingo juega el líder de la Superliga, Rácing, que visita a Gimnasia en el bosque platense. ¿Se podrá hablar de este encuentro ese día, que será el día después del primer Superclásico del fútbol argentino por la finalísima de la Copa Libertadores?
Mañana habrá periodistas de todo el mundo, público llegado de distintas partes para vivir una jornada irrepetible, etcétera...¿Será para tanto?¿El gobierno se verá beneficiado por estos dos Superclásicos en dos semanas? El tiempo lo dirá...
No olvidar que mañana en la Argentina es el día de la tradición. ¿Por el Superclásico? No, por el recuerdo de José Hernández, autor del mítico Martín Fierro, el mayor libro gauchesco nacional.
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