CULTIVOS DE QUILMES: EL PROGRAMA DE HOY


Hoy, como todos los viernes de 16 a 18, hubo una nueva edición del programa Cultivos de Quilmes, por Radio Quilmes (106.5), con la conducción de Mauro y Eduardo Menescaldi, Camila García en la operación técnica.
En los estudios estuvieron los integrantes del conjunto Herederos de la nada, que por las tardes deleitan a los transeúntes en Rivadavia peatonal. Una familia entera dedicada a la música. Con papá Teo, los chicos Salomón, con el bombo, Constanza en violín y guitarra y Lorenzo.
El padre explicó que fue una manera de hacer frente a la crisis al quedarse sin trabajo y en ese sentido destacó que tienen buena recepción del público que pasa por Rivadavia, donde están por las tardes, de lunes a jueves, y el viernes lo hacen en la peatonal Laprida, de Lomas de Zamora.
Teo llegó muy joven de Formosa y armó una familia en Buenos Aires -viven en Florencio Varela- y su pasión por la música la volcó en sus hijos, que rápidamente fueron aprendiendo a tocar distintos instrumentos.
Salomón se luce con el bombo, Constanza con el violín, el más pequeño Lorenzo aporta su picardía artística y junto a papá -mamá Verónica sostuvo que es un orgullo para ellos aportar el arte a la gente- y en el estudio interpretaron temas emblemáticos, como Kilo 11, de Tránsito Cocomarola y Puente Carretero, de Peteco y Cuti Carabajal.
Hablamos con Pablo Mariuzzi, quien presentará el unipersonal Sr rubio de bigote el próximo viernes 7 de diciembre en Casa de Arte Doña Rosa. Adelantó que se basa en un cuento de los 60 y que habla de temas actuales.
Otra charla fue con el actor y cantante Mariano Morelli, integrante de la troupe de In the heist, que se presentó anoche en la Biblioteca Moreno de Bernal.
Morelli, quien también había actuado en Hairspray -en ese caso fue la madre de la protagonista, Tracy, y anoche fue el padre de la protagonista Nina, en ambas situaciones la actriz fue Rocío Díaz- subrayó la importancia de la pieza, y puso el énfasis en la sabiduría del hacedor y director Nicolás Marini, quien construyó un proyecto que supo amalgamar talento y dedicación por parte del elenco, en base a la filosofía del grupo quilmeño Nemesis.
Con Máximo Randrup pudimos poner el acento en el libro que escribió sobre el Chapu Braña, hoy jugador de Estudiantes de La Plata, aunque se formó en la cantera del Quilmes AC, donde llegó a ocupar un lugar fundamental como número 5, a tal punto que hoy una de las tribunas del Centenario lleva su nombre.
Reconoció que cuando le propuso al futbolista escribir sobre su vida se sorprendió y le preguntó si se trataba de una broma. Con el tiempo fue entendiendo la propuesta y llegó a relatar aspectos de su vida futbolística, que curiosamente empezó en el hockey (donde el que se destacó finalmente fue su hermano Javier).
Raúl Acuña, cantante del grupo Mysense, adelantó el show que esta noche darán en un local de Avellaneda, en la calle Mitre 982.
En los estudios estuvo el director responsable del Centro de Producción Audiovisual Leonardo Favio, Claudio Abraham, quien refirió que mañana, en el marco de los seis años del CPA, habrá una interesante movida desde las 17, con una serie de presentaciones, entre otras una charla del Proyecto Arqueológico Quilmes, con Verónica Martí, y las actuaciones del maestro Julio Urruty con las guitarras del IFA y del grupo folklórico quilmeño Los Diucas. También la presentación del  maestro pianista Claudio Molinari.
El cierre fue de lujo: porque llegó a la radio la cantante Azucena del Valle, quien brindó dos excelentes interpretaciones de obras como la cueca, La arenosa, y el clásico Alfonsina y el mar, con todo el talento artístico de una cantante mayúscula. 
Azucena prometió volver para seguir deleitando a la audiencia con su voz y sus interpertaciones, que pueden incursionar el folklore, la lírica, el canto italiano. 
Esta vez se habló poco de fútbol, solo se dijo que el domingo Quilmes recibe a Santamarina y en la charla con Máximo Randrup el entrevistado fue lapidario con el culebrón del Superclásico, que de ser la finalísima de dos argentinos en nuestro país terminó transformándose en una pálida final más allá del Atlántico.

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