CARITAS, ACOMPAÑANDO AL QUE SUFRE


Claudio Spicola, director de Cáritas Quilmes, envió una comunicación a los voluntarios y voluntarias de Cáritas, miembros de las distintas pastorales, comunidades, sacerdotes, religiosos y religiosas, vírgenes consagradas, movimientos y asociaciones laicas, a la sociedad toda.
"Desde Cáritas diocesana Quilmes estamos animando esta campaña solidaria en la problemática de la salud, como siempre en el marco del día nacional del enfermo. Y queremos llamar la atención sobre la acuciante y dramática situación de las personas sin obra social y sin recursos económicos, que no pueden acceder a la medicación para realizar los tratamientos necesarios para su curación. El incremento de los precios de los remedios agravan más el sufrimiento de tantos. En este último tiempo se da una clara disminución de la asistencia del Estado. Esto se observa también en la cobertura del PAMI. Realmente se vive con desesperación la falta de respuesta o la demora en tratamientos costosos. Frente a este sufrimiento de hermanos y hermanas nuestras queremos seguir el ejemplo de nuestro Maestro, Jesús, que como nos relata el evangelista Marcos "... Sintiendo compasión, Jesús extendió la mano y lo tocó diciendo: Quiero, queda limpio. Al instante se le quitó la lepra y quedó sano (Marcos, 1, 41) estaba cerca de los que padecían enfermedad, abandono y discriminación.
Frente al dolor no somos indiferentes, y si bien la demanda nos supera ampliamente, renovamos nuestro esfuerzo en esta Campaña donde invitamos a todos a colaborar comprando el bono contribución a través de las Cáritas en parroquias y capillas (hasta el 15 de noviembre) y donando medicamentos o elementos ortopédicos. Seamos cada uno multiplicador de este llamamiento solidario, hablando con amigos, familiares, vecinos, compañeros de trabajo, conocidos que trabajan en el ámbito de la salud, etcétera.
Cáritas cuenta con 13 bancos solidarios de medicamentos, lo recaudado será destinado a la compra de medicamentos para ayudar parcialmente a cubrir la demanda.
Más allá de las gestiones o pedidos que hacemos al Estado, y la buena voluntad de algunos funcionarios, esto no es suficiente, y desde la cercanía que tenemos con los más pobres y enfermos queremos expresar con claridad que se necesita más presupuesto para la salud pública y que de esta manera nadie quede excluido de un derecho humano fundamental.
Acompañemos al que sufre, con nuestra cercanía afectuosa, con nuestra palabra compasiva, con la oración confiada en Jesús Resucitado, con su palabra y con nuestro accionar concreto, y que Dios bendiga y fortalezca a los trabajadores y trabajadoras de la salud pública que pese a las adversas condiciones en la que deben desempeñarse, renuevan día a día el compromiso por una salud pública gratuita, equitativa e inclusiva para todos.
Que nuestro Siervo de Dios, Jorge Novak, primer presidente de la Comisión Episcopal para la pastoral de la salud, acompañe con su intercesión esta campaña, y la memoria presente de su vida ejemplar nos convoque a trabajar intensamente desde la caridad, la justicia y el amor.

Comentarios