NICOLE Y LUIS, EN EL ESCENARIO DE PADERBORN

Se dice de mí, el espectáculo de Nicole Nau y Luis Pereyra, junto a Ivanna Carrizo y Fernando Gimenez, sigue dando que hablar en Alemania, tras cada presentación.

Así lo destaca la crítica de Paderborn, donde los artistas se presentaron el pasado jueves y viernes.

"Mucho más que tango, Nicole Nau y Luis Pereyra hacen que el escenario de Deelenhaus se transforme en un escenario de cultura e historia argentina. Algo de todo eso simplemente quita el aliento.

Atrapante. Lleno de intensidad: Nicole Nau & Luis Pereyra se funden, por momentos melancólicamente, otro momento fogoso, pero siempre con total entrega y hacia ser una unión perfecta.

De Ann Britta Dohle Paderborn.

Con su espectáculo Se dice de mí, presentan Nicole Nau y Luis Pereyra mucho más que una noche de tango esperada. La bailarina y actriz que cuenta la historia Nau y el coreógrafo y bailarín argentino Pereyra llevan al público hacia un viaje cultura. Un viaje hacia su Argentina, en el cual musicalidad y danza, melancolía e impulsividad, crisis políticas y la historia personal de Pereyra, quien debutó a los 10 años, se funden hacia una vivencia furiosa de todos los sentidos.

Multitalento Pereyra no solamente baila tango, zapateo y elementos folklóricos, sino también toca a la perfección el bombo, la guitarra y canta con una voz áspera e intensamente personal, para luego ofrecer una atracción como un número de lazos (boleadoras de cuero) conjuntamenet al zapateo, un punto final con manos, pies, cuerpo y alma.

El escenario pequeño se muestra como escenario del mundo, en el cual otra pareja participa con Nau-Pereyra, contando las historias y la historia de Argentina en todas sus facetas y dándole vida tanto dancística como musical.

En las coreografías de Pereyra, que fueron creadas alrededor de 1985 y antes, se desata un diálogo atrapante de los pies, el cruzar, entrelazar, los ganchos, por allí un salto. Esos detalles técnicos fueron contados cuidadosamente al público, y mostrados en detalle.

Pero mucho más atrapante y emocionante habían sido los bailes de por sí, los que no necesitaban de ninguna palabra, y contaron, pegados a esos sonidos inquietantes del bandoneón de Piazzolla (Buenos Aires Hora Cero), dando una lucha misteriosa.

Allí, en la danza, nacen esos espacios oscuros, que albergan ese juego voluptuoso de entrega y pérdida, de lo incalculable en el destino.

 A pesar del mostrar, de una noche hecha para el público, las parejas logran, una y otra vez una atmósfera densa y emocionante, con escenas espectaculares, con un duelo de los hombres, el buscar y encontrarse de las parejas, de las figuras y de los elementos siempre y otra vez nuevas, giros, saltos, el detenerse, y las explosiones hacia el final, con los acentos de salto, tira de rodilla, entrega total.

Una interacción de danza y música en vivo, asombroso y vertiginoso, por momentos nace el deseo de que la bella música de la pista también sea en vivo.

Pero el virtuosismo de los bombos de los hombres, y la voz enfática de Pereyra lo equilibran absolutamente.

La segunda parte de la noche está bajo la meta de la fiesta, que ahora está en primer plano.

Lo noble, elegante como también mágico de Buenos Aires, la elegancia y el mito le hacen lugar a la vitalidad del campo. Ahí se gira, se zapatea, se palmean las manos, un baile con un pañuelo inicia lo que luego termina con un pacto con el diablo.

Atrapante y de inmediato el público es contagiado por esa dinámica y alegría vital.

Una noche grandiosa, que aun estremece, a quien escribe, que aun hace asombrar, lo que es posible en un espacio tan reducido".
He aquí una conmovedora crítica del espectáculo de Nicole y Luis, junto a otra pareja, que con Se dice de mí siguen sacudiendo las fibras más íntimas de los alemanes, que aplauden a rabiar.
Ella alemana, el santiagueño-quilmeño, haciendo tabla rasa en el Viejo Mundo y representando a la Argentina como embajadores sin cartera de la cultura nacional, como para sacarse el sombrero y festejar.