El presidente de la Nación, Mauricio Macri, participó del viaje inaugural del ramal electrificado Vía Circuito, entre las estaciones ferroviarias de Bosques y Berazategui.
También estuvo la gobernadora María Eugenia Vidal, el ministro de Transporte de la Nación, Guillermo Dietrich y vecinos invitados.
El Tren Roca sumó entonces el tren eléctrico entre Berazategui y Bosques, recorriendo las estaciones de Berazategui, Ránelagh, Villa España, Sourigues y Bosques.
El ministro Dietrich destacó la importancia del acontecimiento y resaltó que se invirtieron casi 300 millones de pesos para la renovación de vías, sistemas eléctricos y colocación de postes para el tendido de cables y catenaria, fuente de alimentación eléctrica de los nuevos trenes.
De todas maneras la inauguración y el viaje del presidente y los funcionarios volvió a mostrar la eterna grieta, que viene instalándose en el país desde hace años.
Ya la gobernadora lo sufrió ayer en Chascomús, con un escrache a cargo de gremialistas docentes, sumado a las descalificadoras palabras de Hebe de Bonafini, con su lengua mordaz.
En este caso desde el oficialismo se temía la reacción de los militantes opositores, por lo que se evitó todo contacto con los vecinos.
En ese sentido se comentó de distintas maneras el hecho de que el tren pasara la estación Ranelagh y recién se detuviera frente al Ránelagh Golf Club, junto a un dispositivo de seguridad algo exagerado.
Una prueba elocuente de la sinrazón la vivió Gendarmería, que tuvo que separar a vecinos de distintas líneas que se agredían a viva voz. Las cosas no pasaron a mayores pero volvieron a poner sobre el tapete lo que cuesta disentir sin violencia.
El diario EL SOL pone la expresión de una vecina que manifiesta su deseo de un palco en el que estuviera el presidente Macri, la gobernadora Vidal y el hombre fuerte de Berazategui, el doctor Juan José Mussi. Cosa que sería lo normal en un país civilizado y con alta cultura política, pero se sabe que estos tres personajes pertenecen a distintos "bandos" que difícilmente entiendan que democracia es sinónimo de convivencia política civilizada.
También estuvo la gobernadora María Eugenia Vidal, el ministro de Transporte de la Nación, Guillermo Dietrich y vecinos invitados.
El Tren Roca sumó entonces el tren eléctrico entre Berazategui y Bosques, recorriendo las estaciones de Berazategui, Ránelagh, Villa España, Sourigues y Bosques.
El ministro Dietrich destacó la importancia del acontecimiento y resaltó que se invirtieron casi 300 millones de pesos para la renovación de vías, sistemas eléctricos y colocación de postes para el tendido de cables y catenaria, fuente de alimentación eléctrica de los nuevos trenes.
De todas maneras la inauguración y el viaje del presidente y los funcionarios volvió a mostrar la eterna grieta, que viene instalándose en el país desde hace años.
Ya la gobernadora lo sufrió ayer en Chascomús, con un escrache a cargo de gremialistas docentes, sumado a las descalificadoras palabras de Hebe de Bonafini, con su lengua mordaz.
En este caso desde el oficialismo se temía la reacción de los militantes opositores, por lo que se evitó todo contacto con los vecinos.
En ese sentido se comentó de distintas maneras el hecho de que el tren pasara la estación Ranelagh y recién se detuviera frente al Ránelagh Golf Club, junto a un dispositivo de seguridad algo exagerado.
Una prueba elocuente de la sinrazón la vivió Gendarmería, que tuvo que separar a vecinos de distintas líneas que se agredían a viva voz. Las cosas no pasaron a mayores pero volvieron a poner sobre el tapete lo que cuesta disentir sin violencia.
El diario EL SOL pone la expresión de una vecina que manifiesta su deseo de un palco en el que estuviera el presidente Macri, la gobernadora Vidal y el hombre fuerte de Berazategui, el doctor Juan José Mussi. Cosa que sería lo normal en un país civilizado y con alta cultura política, pero se sabe que estos tres personajes pertenecen a distintos "bandos" que difícilmente entiendan que democracia es sinónimo de convivencia política civilizada.
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