MOLINA HABLO DE OBRA EN LA RIBERA


El intendente de Quilmes, Martiniano Molina, destacó la obra hidráulica que se viene realizando en la ribera y sostuvo que por primera vez en la historia  "se trabaja seriamente en una solución para la ribera".
La obra consiste en la construcción de dos grandes conductos debajo de las avenidas Otamendi e Iriarte y una red de colectores secundarios en las calles aledañas.
Precisamente el intendente recorrió la obra para seguir su evolución y señaló que "empezamos a enfrentar un reclamo al que varias gestiones vieron pasar, pero al que ninguna supo o quiso, planificarle una solución definitiva".
El proyecto es llevado en conjunto por Nación y municipio y beneficiará a 45 mil vecinos. Los trabajos son realizados por la Subsecretaría de Recursos Hídricos del Ministerio del Interior de la Nación junto con el municipio.
Acompañaron a Molina el secretario de Desarrollo Urbano y Obra Pública, Francisco Milia y la concejal Raquel Coldani, titular del bloque Cambiemos. El intendente destacó el avance de la construcción de los dos conductos de hormigón debajo de las avenidas Otamendi e Iriarte, que servirán de colectores de agua de lluvia y desembocarán en el Río de la Plata.
Además, se están emplazando ramales secundarias en las calles perpendiculares a sendas avenidas, los que irán conectados a los dos conductos principales y, cuando la obra esté concluida, aceleraran el desagote pluvial en el barrio.
El trabajo forma parte del Plan Maestro de Gestión Integral de Drenaje y Control de Inundaciones de la ciudad de Quilmes, desarrollado por la Subsecretaría de Recursos Hídricos de la Nación, que financia, supervisa y desarrolla las obras, mientras que el municipio se encarga del proyecto y la inspección.
El funcionario Milia señaló que "la obra que hoy estamos viendo es la primera etapa de un plan integral, que incluye también bombas y todo el frente costero. Una vez que se completen todas las etapas, la lluvia dejará de ser un problema en la zona".
En ambas avenidas se construyen conductos de 3,50 metros de ancho por 1,80 metros de alto. En Otamendi recorre la avenida por debajo del pavimento, desde la calle Lora hasta el río, con una longitud total de 1490 metros.
En Iriarte, por su parte, el conducto se inicia 20 metros debajo de la intersección de dicha avenida con Juan B. Justo y sigue hasta el río. Así, alcanza una longitud total de 870 metros.

Comentarios