Aquel 13 de marzo de 2013 el mundo pero fundamentalmente la Argentina se conmovió con la designación del cardenal Jorge Bergoglio, arzobispo de Buenos Aires, como Papa.
Pasaron cinco años y los argentinos todavía seguimos asombrados por tener al primer Papa latinoamericano de la historia.
Bergoglio eligió el nombre Francisco y marcó en este período distintos hitos en la conducción de la Iglesia Católica.
De todas maneras sigue pendiente una visita al país, porque estuvo en Brasil y Chile, por ejemplo, pero todavía no lo hizo a su patria.
Los quilmeños debemos recordar que antes de su nombramiento, como cardenal Bergoglio, estuvo en la catedral de Quilmes presidiendo la ceremonia en la que asumió el obispo Tissera.
Pasaron cinco años y los argentinos todavía seguimos asombrados por tener al primer Papa latinoamericano de la historia.
Bergoglio eligió el nombre Francisco y marcó en este período distintos hitos en la conducción de la Iglesia Católica.
De todas maneras sigue pendiente una visita al país, porque estuvo en Brasil y Chile, por ejemplo, pero todavía no lo hizo a su patria.
Los quilmeños debemos recordar que antes de su nombramiento, como cardenal Bergoglio, estuvo en la catedral de Quilmes presidiendo la ceremonia en la que asumió el obispo Tissera.
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