Nelson Vivas anunció su decisión de dejar el fútbol definitivamente. Se lo anunció a su cuerpo técnico, comenzando por Leonardo Lalo Colombo, su ayudante de campo.
"Ellos tienen derecho para seguir su camino y es mi deber no arrastrarlos en esto que medité y decidí por convicción. Hoy no estoy dispuesto a que el fútbol maneje mi vida. Estoy fuera del fútbol, quiero tener las riendas de mi vida y después el paso del tiempo y la vida misma dirán" sentenció quien como futbolista se inició en el Quilmes AC (al Cervecero llegó procedente de San Nicolás, tras una fallida prueba en Estudiantes de La Plata).
La decisión del Chango, según le dijo a la agencia Telam, es el resultado de una profunda reflexión.
No hay que olvidar que se fue últimamente mal de Estudiantes de La Plata como técnico, y lo mismo le pasó con Defensa y Justicia, aunque tiempo atrás también había tenido problemas en Quilmes.
A mediados de octubre de 2013, tras aquel partido en que Quilmes empató 1 a 1 con Rafaela, en el Centenario, se acercó a un hincha que según él lo había insultado durante el partido desde la platea y lo golpeó, hecho que derivó en tener que dejar el cargo, anuncio que hizo el entonces presidente del club, Aníbal Fernández.
El 6 de mayo último, como técnico de Estudiantes de La Plata, en el partido que el Pincha igualó con Boca sin goles, se rompió la camiseta después de ser expulsado por el árbitro Silvio Trucco. Muy enojado pateó todo lo que tenía adelante y mostró un gran tatuaje en la espalda.
Tampoco la pasó bien en Defensa y Justicia. Según Vivas "vino el hijo del presidente y quiso meterse en mi manera de armar el equipo. Pero hay que fijarse que quedarse o irse de un club argentino no depende de que nos vaya bien o mal. Por supuesto, cuando te va mal te rajan pero en Estudiantes saqué el 60 por ciento de los puntos. Había renovado contrato de palabra, hablamos de los refuerzos y un buen día perdimos un partido y me pegaron un voleo en el culo".
Vivas, como futbolista, se inició en Quilmes y jugó también en Boca, River, la selección nacional y en Europa: Suiza, Inglaterra, España e Italia.
En esta nota de Telam dio esta definición del fútbol de hoy en Argentina: "El público es hostil ante la derrota, el periodismo fogonea los entredichos, las disputas, pone la lupa en los conflictos o en los posibles conflictos y solo una parte está dispuesta y preparada para hablar del juego y de la táctica. El resto opina al revoleo, sin fundamentos, y encima los dirigentes bailan al son del clima de la tribuna ay general tienen un doble discurso: por un lado piden identidad y por el otro, no soportan los malos momentos que hay en toda búsqueda de una identidad".
LA TRAYECTORIA
La anécdota la contaba Emilio Rulo Camaño, técnico y buscador de futbolistas. Lo vio al Chango Vivas en San Nicolás y lo trajo a Quilmes. En realidad primero fue a La Plata y en Estudiantes no lo quisieron, se bajó en Quilmes y se quedó. Corría el año 1990. En el Cervecero estuvo hasta 1994. Su destino posterior fue Boca Juniors hasta 1997.
Después jugó en el Lugano, de Suiza, en el Arsenal de Inglaterra, hubo un préstamo al Celta de Vigo, de España y regresó al club inglés.
En el 2001 jugó en el Inter de Milán, en el 2003 en River y en el 2004 regresó a Quilmes. Al año siguiente culminó su carrera en el Cervecero.
Como técnico empezó en Quilmes en el 2013, en el 2016 dirigió a Estudiantes y este año, a Defensa y Justicia.
"Ellos tienen derecho para seguir su camino y es mi deber no arrastrarlos en esto que medité y decidí por convicción. Hoy no estoy dispuesto a que el fútbol maneje mi vida. Estoy fuera del fútbol, quiero tener las riendas de mi vida y después el paso del tiempo y la vida misma dirán" sentenció quien como futbolista se inició en el Quilmes AC (al Cervecero llegó procedente de San Nicolás, tras una fallida prueba en Estudiantes de La Plata).
La decisión del Chango, según le dijo a la agencia Telam, es el resultado de una profunda reflexión.
No hay que olvidar que se fue últimamente mal de Estudiantes de La Plata como técnico, y lo mismo le pasó con Defensa y Justicia, aunque tiempo atrás también había tenido problemas en Quilmes.
A mediados de octubre de 2013, tras aquel partido en que Quilmes empató 1 a 1 con Rafaela, en el Centenario, se acercó a un hincha que según él lo había insultado durante el partido desde la platea y lo golpeó, hecho que derivó en tener que dejar el cargo, anuncio que hizo el entonces presidente del club, Aníbal Fernández.
El 6 de mayo último, como técnico de Estudiantes de La Plata, en el partido que el Pincha igualó con Boca sin goles, se rompió la camiseta después de ser expulsado por el árbitro Silvio Trucco. Muy enojado pateó todo lo que tenía adelante y mostró un gran tatuaje en la espalda.
Tampoco la pasó bien en Defensa y Justicia. Según Vivas "vino el hijo del presidente y quiso meterse en mi manera de armar el equipo. Pero hay que fijarse que quedarse o irse de un club argentino no depende de que nos vaya bien o mal. Por supuesto, cuando te va mal te rajan pero en Estudiantes saqué el 60 por ciento de los puntos. Había renovado contrato de palabra, hablamos de los refuerzos y un buen día perdimos un partido y me pegaron un voleo en el culo".
Vivas, como futbolista, se inició en Quilmes y jugó también en Boca, River, la selección nacional y en Europa: Suiza, Inglaterra, España e Italia.
En esta nota de Telam dio esta definición del fútbol de hoy en Argentina: "El público es hostil ante la derrota, el periodismo fogonea los entredichos, las disputas, pone la lupa en los conflictos o en los posibles conflictos y solo una parte está dispuesta y preparada para hablar del juego y de la táctica. El resto opina al revoleo, sin fundamentos, y encima los dirigentes bailan al son del clima de la tribuna ay general tienen un doble discurso: por un lado piden identidad y por el otro, no soportan los malos momentos que hay en toda búsqueda de una identidad".
LA TRAYECTORIA
La anécdota la contaba Emilio Rulo Camaño, técnico y buscador de futbolistas. Lo vio al Chango Vivas en San Nicolás y lo trajo a Quilmes. En realidad primero fue a La Plata y en Estudiantes no lo quisieron, se bajó en Quilmes y se quedó. Corría el año 1990. En el Cervecero estuvo hasta 1994. Su destino posterior fue Boca Juniors hasta 1997.
Después jugó en el Lugano, de Suiza, en el Arsenal de Inglaterra, hubo un préstamo al Celta de Vigo, de España y regresó al club inglés.
En el 2001 jugó en el Inter de Milán, en el 2003 en River y en el 2004 regresó a Quilmes. Al año siguiente culminó su carrera en el Cervecero.
Como técnico empezó en Quilmes en el 2013, en el 2016 dirigió a Estudiantes y este año, a Defensa y Justicia.
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