La Municipalidad de Quilmes comenzó a notificar a los vecinos que infrinjan la legislación relativa al arbolado público y su dañado. Se trata de proteger el patrimonio natural del distrito, amparado por la ordenanza municipal 10248/08 y la ley provincial 12276, que prohibe la poda y extracción del arbolado público.
Debe señalarse que las notificaciones son el paso previo para el el acta y multa que, según informaron desde el área municipal competente, puede oscilar entre 1900 y 13.000 pesos.
Frente a la decrepitud o estado deficiente del árbol, con peligro de caída o que obstaculice los servicios públicos, como luminarias y cableado, los vecinos deberán llamar y coordinar los trabajos de adecuación con el área de Medio Ambiente del municipio, al 4350.3000, interno 3047.
Los trabajos de adecuación se harán en el período comprendido entre el primero de mayo y el 31 de agosto.
Además de acudir a la demanda y denuncias vecinales, las cuadrillas municipales recorrerán en forma permanente las zonas del distrito, identificando cualquier tipo de anomalía que requiera el acondicionamiento pertinente.
Una vez hecha la adecuación, el camión recolector pasará a retirar las ramas que luego serán derivadas, para su reducción, a la máquina chipeadora municipal.
El sobrante o chip será entregado para uso domiciliario o abono para la tierra en tres jornadas de distribución a realizarse en tres plazas del centro quilmeño a confirmar, los días 5, 6 y 7 de mayo.
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