En la noche del 24 de febrero y madrugada del 25, hace 12 años, moría el popular cantante de rock, Norberto Pappo Napolitano.
Fue un accidente con su moto en la zona de Luján.
Pappo había nacido el 10 de marzo de 1950 y fue el guitarrista más importante del rock nacional.
Tocó en la primera formación de Los Abuelos de la Nada y en Los Gatos.
Pappo nació en la casa de Artigas casi Camarones, en el barrio de La Paternal, donde existe una placa recordatoria.
Participó en Conexión Nro. 5, La Pesada del Rock and Roll y muy poco tiempo en Manal.
Su primera banda fue Pappo´s blues, formada en 1970, con David Lebón y Black Amaya, banda que siguió durante una década.
Tras la fugaz experiencia con el ex Manal, Alejandro Medina y el baterista brasileño Rolando Castello Junior a fines de los 70, en los 80 Pappo fundó su segunda banda, Riff, integrada por Michel Peyronel, Boff, Vitico y algunos discos con JAF (Juan Antonio Ferreyra), donde dejó de lado el blues y se acercó al hard rock.
Pappo se acercó a importantes músicos de rock y del blues argentino e internacional, como John Bonham, de Led Zeppelin, Lemmy Kilmister de Motohead y el bluesman norteamericano B.B.King, quien lo invitó a zapar, en vivo, EN EL MADISON SQUARE GARDEN en Nueva York, en 1993.
En 1984 Pappo decidió iniciarse como solista y se presentó en Obras con el grupo Boxer.
En 1987 grabó Pacto diabólico y más tarde se instaló en Los Angeles, Estados Unidos y formó la banda llamada The Widow Maker (el hacedor de viudas). Con ella hizo una gira por Sudamérica y 24 ciudades de Estados Unidos.
En 1992 junto al bernalense Javier Martínez y Alejandro Medina, dos tercios del grupo Manal, grabó Blues Local.
Su banda estaba integrada por Black Amaya en batería, Miguel Botafogo en guitarra, Luis Robinson en armónica y Pato Frasca en teclados.
Para fines de año tocó junto a B.B.King en Obras Sanitaris y luego teloneó a Guns And Roses en River Plate.
Pappo tenía mucha ligazón con Quilmes, ciudad a la que venía seguido. Entre sus amigos vale mencionar al fotógrafo Juan Prokopez, con quien le unía profundos lazos.
Cuando se cumplieron siete años de la muerte de Pappo, en 2012, en el diario El Sol, Prokopez lo recordaba. Incluso hacía escuchar en el teléfono la voz del hijo de Pappo, Luciano, que sorprendía intensamente porque era un Pappo auténtico. Luciano lideraba el grupo Lovorne (vale mencionar que Pappo reconoció a su hijo recién a los 18 años).
Decía Prokopez en aquella nota, en su local de Castelli y las vías del ferrocarril: "Hablar de Pappo es una satisfación enorme, por la amistad que me dispensó durante tantos años. Lo conocí en los 70 en la pileta de Plátanos, cuando se presentó junto a Los Gatos. Años más tarde lo recuerdo en Electric Circus, por el 85, con Riff, pero la gran amistad surgió promediando la década de los 90.
"Era un personaje único, como se dice ahora, no tenía desperdicio, con su carácter, con su genio, su bonhomía.
Prokopez destacó el gran reconocimiento que logró cuando se hizo actor en la telenovela Carola Casini, junto a Araceli González. En la telenovela el artista se mostraba tal como era, sobre todo porque su personaje era fanático de los fierros, algo que a Pappo lo atrapaba.
Una de sus más populares canciones, Mi vieja, hizo de Pappo un artista más que popular, con aquella frase de "nadie se atreva a tocar a mi vieja, porque mi vieja, es lo más grande que hay ....".
Debe agregarse que otro tema que popularizó el Carpo fue Juntos a la par. Muchos creen que le pertenece, cuando en realidad su autor es un bernalense, Yulie Ruth (Julio Rutigliano).
El accidente
El accidente en el que perdió la vida Pappo ocurrió en la noche del 24, madrugada del 25 de febrero, en el kilómetro 69,5 de la ruta 5, en Luján.
Hubo distintas versiones sobre las causas, aunque se sabe que Pappo, su hijo y la compañera Gabriela Sfeir habían estado cenando en un local de la zona. Luego salieron en sus motos, Pappo iba solo, y aparentemente rozó a la de su hijo, siendo despedido y luego atropellado por un automovilista.
Hay un libro, Hombre suburbano, de Sergio Marchi, que habla del accidente y las causas, aunque el hijo de Pappo, Luciano, suele criticar lo que se publica.
Pasaron 12 años y todavía se sigue escuchando su voz hablando de la vieja -nadie se atreva a tocarla- y de ir juntos a la par.
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