NICOLE Y LUIS, EXITOSO DEBUT EN NEUSS

Las críticas son elogiosas siempre. No podía ser de otra manera esta vez: Nicole Nau y Luis Pereyra, junto a su elenco, presentaron en la ciudad de Neuss, Alemania, el espectáculo VIDA, ARGENTINO.
La crítica en este caso titula Tanto virtuoso y estruendoso (en una palabra) y comienza diciendo que "el nuevo espectáculo Vida Argentino, de Nicole Nau y Luis Pereyra, se estrenó en el teatro de Neuss con una premier brillante, aplaudida y festejada por el público.
"La explosión del bombo para iniciar el espectáculo Vida, Argentino preparó el piso para la reina de la noche. Con orgullo y nobleza Nicole Nau camina cruzando el escenario con un vestido floreado y aireado.
Desde el grupo de los músicos que está detrás de las gasas, se separa Luis Pereyra, la rodea, la conquista y ahí la pareja entre en el baile. Hombre y mujer parecen hacerse uno. El le abre el vestido floreado y otro vestido brillante aparece, y lo que ahora sigue es una danza con pasos llamativos, con música fogosa. El público se olvida de respirar y solamente está asombrado.
"Con el teatro completamente lleno, Vida Argentino festejó su estreno europeo. Hasta principios de abril el espectáculo girará por Alemana, Francia, Austria, Suiza y los países bajos.
Nicole Nau y Luis Pereyra, que son unos de los artistas de tango más famosos en su país y desde hace muchos años un matrimonio, son un centro brillante. Tanta perfección, tanta alma... Uno primero admira y halaga a la bailarina hasta que la mirada cae sobre su compañero. Sus piernas son livianas y libres como plumas y ágiles y precisas en las combinaciones más complejas. A partir de ahí uno no quiere perder a ninguno de los dos de la vista. Son todos virtuosos, también los músicos del espectáculos, las tres parejas y un cantante, que tiene una voz potente y sin embargo, muy melancólica y pesada.
"Juntos logran crear un cosmos fascinante, lleno de pasión y entrega hacia el tango y a la Argentina. Esa herencia cultural es honrada con sonido de bandoneón, con zapateo de malambos ágiles, con boleadoras que hacen música y también en el uso del mismas, Luis Pereyra es un verdadero maestro.
"Muy bellas imágenes quedan en la retina cuando Nicole Nau deja caer un mar de pétalos sobre los hombros de Luis Pereyra, cuando las mujeres rodean un Jembe descalzas y simples y cuando son como los altos sacerdotes incas, toman y atrapan hacia un éxtasis.
"El espectáculo, tanto visual como musical, es atrapante y honra los pagos de Luis Pereyra. Y que él después se vista de gaucho subraya completamente su relación con su tierra. Nicole Nau se puso la meta de luchar contra los prejuicios de los artistas argentinos de aquel tiempo (los 80) y logró vencer, con trabajo y dedicación, los obstáculos que naturalmente se le ponían enfrente y llegó hasta aquí triunfante.
"Hay un solo bailarín del que no se puedo sacar de los ojos en toda la noche. Es un bailarín al que le salen chispas en cada mirada, en cada paso, en cada movimiento y ese bailarín es Luis Pereyra. El rechaza completamente a los cliché comunes del tango. No hay luces rojas, no hay conquistas exageradas. No hay dominio del hombre sobre la mujer y no hay mujer que se postre sobre el macho como un objeto.
"Vida Argentino es una aventura para todos los sentidos, un acto de cultura que pone a la Argentina en un primer plano. Y después de los bises, los artistas siguen bailando, tocando y cantando entre el público que no para también de aplaudir y bailar.
"Afuera, en el foyer, Nicole Nau espera atenta para dar su autógrafo al público que sale bailando de la sala. Es una noche que calienta el corazón".
Hasta aquí la elogiosa crítica del debut de la alemana Nicole y del santiagueño Luis, con sus músicos, que están comenzando una gira europea, que seguramente producirá los mismos efectos en todos los países y localidades que van a recorrer, con un cierre a toda orquesta en los primeros días de abril, tres concretamente, nada menos que en el Folies Bergere, de París, Francia.
Nicole y Luis, residentes quilmeños, que desparraman su talento por el mundo. !Qué orgullo!

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