La gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal y el ministro de seguridad provincial, Cristian Ritondo, presidieron ayer la ceremonia de juramento de 8000 nuevos policías. Entre los asistentes estuvo el intendente de Quilmes, Martiniano Molina.
"Cada uno de nosotros tenemos que hacer nuestra parte para que los millones que viven en la provincia sepan que a partir de mañana van a estar más seguros. Yo confío en que ustedes van a hacer lo correcto y por eso no van a estar solos" dijo la gobernadora, quien definió la decisión de los nuevos cadetes como valiente y heroica "ya que en esta profesión deciden poner en riesgo su vida para proteger la de los demás".
La primera magistrada de la provincia remarcó que el gobierno no dará lugar a los efectivos corruptos. "Con la misma convicción, les digo que sí van a estar solos si deciden convivir con el delito. No es lo mismo el que hace las cosas bien, el que es honesto, el que se esfuerza, el que está comprometido que el que no lo hace".
El intendente Molina destacó el trabajo en conjunto que vienen sosteniendo los diferentes actores involucrados en la seguridad ciudadana. "La seguridad de nuestros vecinos es prioridad para este gobierno. Por eso trabajamos de manera constante junto a la gobernadora, el ministro y las diferentes fuerzas nacionales, provinciales y municipales.
El jefe comunal dedicó unas palabras a los 76 policías locales recibidos que comenzarán a prestar servicio en nuestra ciudad. "Depositamos mucha confianza en cada una de las camadas recibidas. Esperemos que puedan desarrollar su trabajo de la mejor manera, para que de forma mancomunada le demos al vecino la calidad de vida que merece".
El ministro de Seguridad, Ritondo, recordó que egresan 8000 policías en la provincia, tras un curso de nueve meses y una escuela totalmente distinta. "Esperemos que los valores, el trabajo y la disciplina que se les inculcó sirvan para tener una nueva camada de policías.
Pablo Fuchs, jefe de la policía local, mostró el orgullo por el nivel alcanzado por el nuevo personal. "Fueron entrenados por los mejores instructores y docentes, logrando así una policía más capacitada para proteger al vecino".
En el mismo acto, la gobernadora Vidal realizó un balance del año en materia de seguridad y detalló que más de 60.000 policías tendrán su chaleco antibala y se sumaron más de mil patrulleros nuevos -200 de ellos blindados y con cámaras de 360 grados.
Por primera vez los policías de calle recibirán un bono de 2500 pesos hacia fin de año, medida que alcanza a más de 53.000 efectivos provinciales de todo rango.
"Sé que estamos lejos del salario que ustedes y nosotros pensamos que hace falta. Sabemos el esfuerzo que hacen los policías de calle, los que ponen el cuerpo, los que estaban sin chalecos y que hoy lo tienen. Por eso, hemos resuelto con el ministro de Seguridad que reciban un reconocimiento de 2500 pesos por única vez" enfatizó Vidal.
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